“Estoy muy contento de volver a Chile tras tantos años”
► El gran conductor y pianista anuncia su visita a Chile para el próximo 9 de agosto en el CA 660 de CorpArtes junto a la Orquesta West-Eastern Divan.
Desde hace muchos años, un buen grupo de chilenos melómanos se vienen enterando con envidia de los conciertos que regularmente ofrece el pianista y director argentino-israelí Daniel Barenboim al otro lado de la cordilllera. Se trata de programas extensos, con solistas del calibre de Martha Argerich o del tenor Jonas Kaufmann, con la orquesta Staatskapelle de Berlín o con la West-Eastern Divan, con Wagner, Strauss o Ravel, pero también con tangos y hasta bossa nova. En fin, el espectácuilo Barenboim en Buenos Aires se suele repetir con la misma regularidad que un clásico Boca-River y la única posibilidad de asistir es costearse el pasaje y pagar el Teatro Colón. En este año, el espectáculo viene a Chile: el próximo miércoles 9 de agosto, Daniel Barenboim y su orquesta West-Eastern Divan se presentarán en el Teatro CA 660 de CorpArtes.
Se trata de la primera vez que el músico viene a nuestro país desde agosto del 2000, cuando se presentó como pianista en un extenso recital en el Teatro Municipal. Sin embargo, en esta oportunidad la audiencia local podrá apreciarlo en toda la gloria y esplendor de su calidad como directror de orquesta, una actividad que viene desarrollando desde hace más de 40 años, pero que en los últimos 20 se ha intensificado como nunca. Es más, Barenboim es una de las batutas de referencia a nivel mundial y es probable que en compositores como Richard Wagner y Anton Bruckner no tenga competencia en este momento.
Director titular de la prestigiosa Staatskapelle de Berlín desde hace 25 años, ganador de siete premios Grammy y Premio Príncipe de Asturias en el 2002 junto a Edward Said, Barenboim es una de las figuras culturales más relevantes salidas de Latinoamérica en la última mitad del siglo XX. Nacido en 1942 en Buenos Aires dentro de una familia porteña de origen judío, el futuro pianista y director hizo una rápida carrera en los años 60 y 70, registrando una gran cantidad de repertorio pianístico, con especial énfasis en Beethoven y Mozart. Ha grabado dos veces los ciclos de las 32 sonatas de Beethoven, sus nueve sinfonías y sus cinco conciertos para piano. Además, Barenboim ha registrado en tres oportunidades las nueve sinfonías de Bruckner y casi todas las óperas de Wagner.
Tras esta carga pantagruélica de discos y una no menos importante labor en conciertos (fue titular de la Sinfónica de Chicago y director de La Scala de Milan), tal vez el proyecto más personal del maestro argentino es la West-Eastern Divan Orchestra, una agrupación formada por músicos israelíes y de países árabes (incluyendo los territorios palestinos ocupados). Creada en 1999 junto al intelectual estadounidense de origen palestino Edward Said, la West-Eastern Divan Orchestra funciona como puente cultural entre países políticamente enfrentados. Con este conjunto es que tocará en Chile el poema sinfónico Don Quijote de Richard Strauss (1864-1949) y la Quinta Sinfonía de Piotr Ilych Tchaikovsky (1840-1893).