Bolivianos expulsados tras 101 días de detención: “No hicimos daño”
► Salieron a las 3.50 del penal de Alto Hospicio rumbo a Colchane. ► Ocho vehículos del grupo Erta, de la PDI, escoltaron la caravana.
Tras permanecer 101 días detenidos en la Cárcel de Alto Hospicio, Región de Tarapacá, ayer regresaron a Bolivia los siete funcionarios aduaneros y dos militares de ese país que fueron condenados por robo con violencia y contrabando -y porte ilegal de armas, en el caso de dos de ellos-, conmutándoseles la pena por la expulsión del país.
Su arresto, por parte de Carabineros, se produjo en la mañana del 19 de marzo pasado, en la zona fronteriza de Panavinto, lo que finalmente se transformó en un incidente diplomático, tras las críticas del gobierno boliviano al proceso judicial y la actuación de La Moneda.
El procedimiento para trasladarlos hacia el paso fronterizo de Colchane se inició a las 3.50 horas de ayer. Había tensión en el ambiente. Un contingente de la PDI fue hasta el penal, recogió a los bolivianos y los trasladó hasta la Brigada de Investigación Criminal, en Alto Hospicio. Allí permanecieron cerca de 40 minutos. A las 4.30, la caravana, compuesta por ocho vehículos, inició su marcha a Colchane, a 224 kilómetros de distancia.
Casi tres horas duró el viaje. Se sentía el frío de altiplano, con menos de 6° C. Las camionetas de la PDI llegaron al complejo fronterizo, donde estaba instalado un dispositivo especial de Carabineros, que permitió el acceso directo de los móviles y la atención inmediata de los extranjeros.
Los nueve funcionarios bolivianos descendieron de un minibús que transportó a todo el grupo. Estaban esposados y fueron acompañados por efectivos del Grupo de Reacción Táctica (Erta), de la PDI, fuertemente armados y bajo un estricto cerco de seguridad.
En la comitiva también ha- bía personal diplomático, como la cónsul general de Bolivia en Chile, Magdalena Cajías.
Sólo 15 minutos
En 15 minutos se cumplió el procedimiento administrativo de expulsión. En el cercano distrito de Pisiga Bolívar, en territorio boliviano, los siete aduaneros y los dos militares eran esperados por