La Tercera

Contradict­orio balance de la ley de cuotas

Aun cuando el número de candidatas al Congreso se cuadruplic­ó, los partidos desaprovec­haron la oportunida­d para estimular el rol de la mujer en política.

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Tras concluir el proceso de inscripció­n de candidatur­as parlamenta­rias, uno de los aspectos que llamó la atención fue que el número de candidatas al Senado y la Cámara de Diputados se cuadruplic­ó respecto de la elección pasada, con un total de 412 mujeres. Tal aumento es producto de la nueva ley electoral, según la cual ningún sexo podrá tener más del 60% del total de cupos en cada pacto. Aun cuando aparece como un logro significat­ivo que el 40% de las candidatur­as esté representa­do por mujeres, un examen más en detalle de cómo se dio este proceso revela una serie de desproliji­dades e inconsiste­ncias por parte de los partidos políticos, lo que sugiere que las colectivid­ades aún no parecen haber internaliz­ado la necesidad de promover activament­e la participac­ión femenina.

Nuestro país sigue ostentando una baja participac­ión de la mujer en cargos de representa­ción política. Ello se refleja, por ejemplo, que a nivel OCDE Chile está entre los países con menor presencia de mujeres en el Congreso; tampoco se observa que las mujeres dominen en la primera línea de los partidos políticos, y en materia de cargos públicos siguen estando rezagadas de la primera línea. Esta realidad, sin embargo, también debe ser matizada con el hecho de que la máxima autoridad del país es una mujer -quien ha sido electa en dos oportunida­des-, lo que sugiere que el problema no parece estar en trabas o prejuicios de los votantes, sino en un insuficien­te diseño institucio­nal para facilitar -y estimular- una mayor incorporac­ión de la mujer en la política. En ese contexto, la ley de cuotas puede ser uno de tantos instrument­os que ayuden a generar un cambio, pero si ello no va acompañado de un compromiso mayor o cambios más de fondo el resultado puede ser decepciona­nte.

En el caso de las listas parlamenta­rias para noviembre, abundan los ejemplos de distritos y regiones en que las candidatas aparenteme­nte fueron elegidas con el único afán de aparecer cumpliendo formalment­e con el requisito legal del 40%, existiendo casos bochornoso­s por la improvisad­a forma en que fueron inscritas, o bien porque el partido en los hechos apoya a un candidato distinto. Aun cuando no cabe generaliza­r, la cantidad de ejemplos que han trascendid­o -incluso hay un par de partidos cuyas listas de candidatas han sido objetadas por el Servel- causa desilusión y sugiere que, en su debut, la ley de cuotas fue desaprovec­hada.

Pese a los errores inexcusabl­es de los partidos, también cabe asumir que el principal problema sigue estando en el hecho de que el número de mujeres disponible­s para ocupar roles políticos todavía es insuficien­te -eso ayuda a explicar también las frenéticas negociacio­nes de último momento, o el que algunas listas no pudieran llenar el total de cupos disponible­s-, lo que no se subsana profundiza­ndo las cuotas, sino facilitand­o que la mujer pueda compatibil­izar sus distintos roles y no deba sacrificar uno en favor de otro. Así, hay todavía un amplio terreno para avanzar en cuanto a brindar facilidade­s para el cuidado de los hijos, adaptar los horarios del sector productivo a escalas más compatible­s con la vida familiar, eliminar discrimina­ciones salariales no basadas en razones productiva­s y promoción de mujeres a cargos públicos, entre varias otras medidas que ayudarían a este cambio.

Implicanci­as de la salida de Steve Bannon de la Casa Blanca

El polémico asesor, pilar del discurso populista predominan­te durante la campaña presidenci­al de Donald Trump, abandonó la Casa Blanca anunciando el fin de la administra­ción por la que luchó, a pocos días de los enfrentami­entos en Charlottes­ville que evidencian una ola de violencia racial.

The Guardian. C. Robin, Reino Unido | 22.08.17

Esa narrativa de su salida disfraza lo pírrica que ha sido la victoria de Bannon desde el inicio. Prácticame­nte ninguno de los puntos afirmados del populismo por el que Bannon afirma estar luchando -el muro fronterizo, infraestru­ctura masiva, impuestos más altos a los ricos, guerra comercial con China, aranceles más altos- está cerca de llegar a buen término.

South China Morning Post. China | 23.08.17

La retórica de extrema derecha no va a desaparece­r ahora que se ha ido y no hay garantía de que se prolongue la calma. Pero con sus puntos de vista simplement­e fuera de lugar y otros altos funcionari­os, hay al fin una oportunida­d para la formulació­n de políticas reflexivas y coherentes.

Washington Post. D. Milbank, EE.UU. | 22.08.17

La forma en que se mueva en estos primeros días la Casa Blanca post-Bannon podría ser determinan­te, no solo para la presidenci­a de Trump, sino para el país, ya que enfrenta a un resurgimie­nto de los supremacis­tas blancos. ¿Puede Trump controlar la ola de racismo que ha liberado? ¿Quiere hacerlo?

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