Yemen ante una guerra olvidada y una crisis humanitaria
El país enfrenta un conflicto armado desde 2014 y un reciente estallido de un brote de cólera.
Decenas de personas murieron ayer y varias resultaron heridas, incluidos civiles, al norte de Saná, la capital de Yemen, debido a un bombardeo que realizó la coalición liderada por Arabia Saudita. Uno de los ataques habría alcanzado un pequeño hotel cercano a un puesto de control de los rebeldes hutíes, que dominan el noroeste de Yemen, incluida Saná, tras la expulsión hace dos años del Presidente Abdu Rabu Mansur Hadi. Los rebeldes hutíes han acusado a Riad de estar detrás del ataque, mientras que Arabia Saudita no se ha pronunciado. Sin embargo, según agencias y la televisión local, la cifra de muertos en el hotel, que quedó totalmente destruido, llegaría a 70.
El ataque volvió a poner en el centro de la atención a Yemen, país que vive hace casi dos años y medio una “guerra olvidada”, con alrededor de tres millones de desplazados. De acuerdo con The New York Times, los continuos bombardeos han paralizado puentes, hospitales y fábricas. Médicos y funcionarios han tenido que trabajar durante un año sin recibir sueldos. Y la desnutrición y la falta de infraestructura han provocado que el país sea vulnerable a enfermedades.
En abril, estalló un brote de cólera que ha afectado a 540.000 personas y provocado 2.000 muertos, según Médicos Sin Fronteras. Este es uno de los brotes más grandes de los últimos 50 años a nivel planetario. Según los organismos internacionales, Yemen sufre la mayor crisis humanitaria del mundo. A enfermedades como el cólera se suman los 8.400 muertos y 48.000 heridos por la guerra, muchos de ellos civiles, de acuerdo con la OMS.
Según la ONU, Yemen necesita US$ 2.300 millones en ayuda humanitaria este año, pero sólo el 41% de ese monto ha sido recibido. Además, de acuerdo con UNICEF, más de 2,2 millones de niños tienen desnutrición aguda y alrededor de 462.000 sufren de desnutrición grave.
Mientras los ojos del mundo enfocaban su atención en Siria y la crisis de los refugiados en Europa, el país comenzó una sangrienta guerra. Yemen ha sido por años el país más pobre del mundo árabe y ha sufrido frecuentes conflictos armados. El último se inició en 2014, cuando los hutíes, aliados con sectores del Ejército de Yemen, asaltaron la capital, forzando al Presidente, reconocido internacionalmente, al exilio.
La crisis en Yemen comenzó luego de la Primavera Árabe, cuando se realizaron manifestaciones en contra del entonces mandatario Ali Abdalá Saleh, quien cedió el poder en febrero de 2012 y fue reemplazado por Abdu Rabu Mansour Hadi, en una elección con un solo candidato. Los rebeldes hutíes, de la minoría chiita y cuya base de poder está en el norte, comenzaron a manifestarse en contra del gobierno sunita a mediados de 2014.
La situación se intensificó cuando los hutíes, aliados con fuerzas de seguridad leales a Saleh comenzaron a tomar territorio. Yemen está dividida entre los hutíes, Al Qaeda y la coalición de Arabia Saudita.b