Centro con sobrecupos
sión de la suma de esas sentencias significa que la persona va a ser muy adulto como para estar cumpliendo condena en el Sename.
Respecto a cómo se puede explicar el caso de una persona que a los 37 años esté cumpliendo una sanción por Ley de RPA, dijo que “a algunas personas les quedaron causas pendientes (decretadas cuando era menores), lo que significa que cuando salen de la cárcel al ser adultos tienen que cumplir esa condena”.
Adultos presos en Sename
De los más de cinco mil adultos registrados en el sistema de RPA, casi la mitad (2.433) cumplen una condena en un Programa de Libertad Asistida Especial, el que consiste en el acompañamiento de un delegado que se encarga de intervenir de forma ambulatoria a una persona para reintegrarla a la sociedad.
En tanto, hay 280 adultos recluidos en centros cerrados del Sename. A ellos se suman 62 más que también se encuentran privados de libertad por internación provisoria, un tipo de cautelar que es el símil de la prisión preventiva.
Así, de un total de 891 personas recluidas por infringir la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente, 549 son menores y 342 son adultos, lo que equivale al 38%.
Melo indicó que esta situación complica a los recintos de detención “ya que se debe respetar esa separación”. Agregó que “esta dificultad se agudiza en los centros de regiones, donde tienen en el mismo lugar a adolescentes en internación provisoria y condenados, y a hombres y mujeres que están recluidos en el mismo establecimiento”.
Según Melo, también debiera prohibirse que personas que hayan estado en prisión preventiva o cumpliendo condena encarcelados como adultos, ingresen luego a un centro cerrado del Sename a cumplir una sentencia privativa pendiente como adolescente. Cree que esto produce un contagio “criminógeno”.
En tanto, para el gerente general de la Fundación San Carlos de Maipo, que hayan mayores de edad internados en un centro del servicio “no es bueno (...) las intervenciones están pensadas para adolescentes y jóvenes, no para adultos”.
Al respecto, desde el Sename señalaron que “cuando los mayores de edad permanecen en los recintos privativos de libertad, tienen secciones separadas de los menores. Del mismo modo, quienes están cumpliendo sanciones por la LRPA en recintos de Gendarmería están en secciones juveniles, separados de la población que cumple condena por la ley penal de adultos”.
Agregaron que todos los mayores de 30 años informados que están cumpliendo sanciones por Ley de Responsabilidad Penal Adolescente, no se encuentran recluidos.b
“Hoy un joven comete un delito y no se tiene cómo saber si es reincidente”.