INCONVENIENTE VORÁGINE DE FERIADOS
El Senado acaba de aprobar el proyecto de ley para que el 2 de octubre sea feriado en la región de Los Ríos. Magallanes, a su vez, acaba de conmemorar el 21 de septiembre como feriado, en virtud de una ley aprobada en honor a la toma de posesión del estrecho. El pasado 10 de agosto, fue feriado regional en Atacama, para conmemorar el día del minero. Otra moción busca que el 20 de septiembre sea feriado en la región de Coquimbo, con motivo de la fiesta de La Pampilla.
En marcha están proyectos -también originados en mociones- que buscan declarar feriados el 17 y 18 de enero de 2018, tanto en La Araucanía como en Tarapacá, con motivo de la visita del Papa, y el 1 de junio en Valparaíso, día de la cuenta pública; para Lanco y Maipú también se propone un feriado por una sola vez, para el 28 de diciembre de este año y el 5 de abril de 2018, respectivamente. La Presidencia de la República también ha contribuido con lo propio, patrocinando el proyecto que permitió decretar feriado el 2 de enero de este año, y proponiendo otro para que el 24 de junio de cada año se conmemore a los pueblos indígenas.
Podrían continuar citándose ejemplos de propuestas para feriados nacionales, regionales o comunales en tramitación, que a juzgar por su cantidad parecen estar fuera de control, producto del populismo parlamentario. Chile ya es uno de los países con mayor número de feriados a nivel mundial, lo que hace indispensable una regulación mucho más estricta, de modo que se devuelva su carácter excepcional, para que no pierdan su sentido y se minimicen los impactos productivos.