Mensajes sobre un mismo tema
Existe una antigua sentencia alemana que se emplea con entonación burlona: “¿por qué hacerlo fácil si se puede hacer difícil?”. Ésta se aplica cuando alguien busca complicar las cosas con explicaciones que no se entienden bien, pero que en el fondo son simples y sencillas. Ocurre a menudo con algunos términos extranjeros que, aunque tienen el encanto de parecer más cultos, son solo importaciones idiomáticas disponibles para los usuarios de los ámbitos tecnológico y digital. Lo anterior, a propósito de una carta de la lectora Silvia María Millas S., que señala: “leo en muchas partes del diario la palabra ‘hashtag’?” y, pregunta: “¿no hay una palabra en español que aclare más nuestra comunicación diaria?”.
Cierto, la hay. Hace ya varios años, “hashtag” ingresó desde el inglés a nuestra conversación diaria, pero puede sustituirse por un buen equivalente en español: etiqueta.
“Hashtag” es una palabra, una frase o un grupo de caracteres alfanuméricos, que se emplean en las redes sociales para agrupar varios mensajes sobre un mismo tema. Se identifica fácilmente, ya que está compuesto por el símbolo # (hash) y un nombre o etiqueta (tag), por ejemplo: #escribireninternet. La fundación del Español Urgente, que ha tratado este anglicismo, señala que en los medios escritos es frecuente encontrar este término: “Los hashtags de Twitter cumplen diez años” o “Los usuarios se divirtieron con el hashtag #PelículasEn1Tuit”. Esta instancia de la lengua, que vela por el buen uso del idioma en los medios de comunicación, considera innecesaria la palabra “hashtag” y recomienda que en su lugar se emplee el término etiqueta: “Las etiquetas de Twitter cumplen diez años”.
Y, hay una ventaja adicional sobre el anglicismo “hashtag”: en español
se puede conjugar el verbo etiquetar.
No suena bien...
El lector Mauricio Alcalde S., indica que en la sección Negocios de La Tercera leyó una información titulada “Muchos en el mercado les asignan demasiado valor al cambio político”. Dice que “algo me suena mal. ¿Está correcto el título, o debió decir ‘le asignan’?”.
A muchos nos sonó mal. Cierto, hay un error: lo correcto debió ser “le asignan demasiado valor (...)”.
El diccionario Panhispánico de Dudas, DPD, señala que la concordancia es la coincidencia obligada de determinados accidentes gramaticales (de género, número y persona) entre distintos elementos variables de la oración. Es un tema que presenta algunas dificultades, ya que existen reglas gramaticales generales de concordancia y algunos casos especiales, que hay que repasar uno a uno. Pero, el oído a veces ayuda: si algún título u oración suena mal, podemos revisar la norma en el sitio “http://lema.rae.es/dpd/srv/search?id=XEVeLzVZaD6CG25cW5”.
Los de Santiago
La lectora Martha Lucía Camacho escribe que en La Tercera ha visto santiaguino con y sin diéresis. “¿Cuál es la versión correcta?”
Es santiaguino, sin diéresis. La diéresis o cremilla es un signo ortográfico que se usa sobre la vocal u (ü) de las sílabas “gue” y “gui” para indicar que la vocal representa un sonido que debe pronunciarse, como pingüino y ambigüedad. La palabra santiaguino, en consecuencia, no lleva diéresis y la manera correcta de escribirla es: santiaguino.