Los enfrentamientos que marcaron el debate en la Universidad de Chile
“Yo vivo en Peñalolén, no en Vitacura. Ahí está la diferencia cómo entra la plata”. Bastó esa respuesta de Alejandro Guillier a un emplazamiento de Marco Enríquez-Ominami a rebajar las dietas de los parlamentarios para tensionar el debate organizado por la Universidad de Chile y donde los panelistas eran 10 premios nacionales.
La sentencia del abanderado de Fuerza de Mayoría fue interpretada por su contendor del PRO como un intento por poner un manto de duda sobre el origen del financiamiento de la casa en que vive junto a su esposa, Karen Doggenweiler.
“Lo que usted acaba de hacer es gravísimo (...), que insinúe que la casa donde vivo está hecha con recursos falsos y truchos, pídale perdón inmediatamente a Karen”, contestó Enríquez-Ominami, cuya esposa también recriminó -a viva voz y desde el público- los dichos del senador independiente.
Otro enfrentamiento que marcó el foro lo protagonizaron el candidato independiente (ex UDI) José Antonio Kast con Eduardo Artés. “Estúpido y fascista, además”, le dijo el abanderado de Unión Patriótica cuando Kast lo identificaba con una izquierda “extrasistema” que no tendría problemas en convocar a “tribunales populares” para llegar al poder. “Córtenle el micrófono a este señor que claramente tiene un mal día”, contestó Kast.
Terminado el evento, continuaron las recriminaciones entre Enríquez-Ominami y Guillier. En un punto de prensa, el líder del PRO acusó al senador de haber juntado las firmas para inscribir su candidatura ayudado por un dirigente presuntamente vinculado al narcotráfico (aludiendo al alcalde de San Ramón, Miguel Ángel Aguilera).
Guillier explicó que lo que quiso decir era que “un político debe vivir como la gente a la que pretende representar”. Y agregó que cuando no hay voluntad para entenderse, se usa todo como pretexto.
En este sentido, el presidente del PPD, Gonzalo Navarrete, advirtió que Enríquez-Ominami hace tiempo que está en una actitud de “provocación explícita” y que está repitiendo “los vicios que llevaron a la centroizquierda a perder la elección de 2009 frente a Sebastián Piñera. ●