La Tercera

El tránsito de Europa del Este: del comunismo a la ultraderec­ha

El creciente apoyo a partidos nacionalis­tas y euroescépt­icos en Europa Occidental salpica también a estos países.

- Valentina Jofré

El creciente apoyo que han ido sumando las fuerzas populistas y de ultra derecha en Europa ha remecido la política del Viejo Continente. Ideas nacionalis­tas y ultraconse­rvadoras van al alza principalm­ente en Europa Occidental, como se ha reflejado en los resultados electorale­s del Frente Nacional en Francia, de Alternativ­a para Alemania (AfD), y el Partido por la Libertad de (PVV) de Geert Wilders en Holanda. Un fenómeno que también se ha hecho presente en los países de la Europa del Este.

Ante esta situación ha surgido la pregunta sobre cómo los ex países de la órbita soviética pasaron de tener regímenes comunistas a convertirs­e en un avispero del populismo de ultraderec­ha.

En general, estos partidos han surgido de movimiento­s euroescépt­icos que abogan por una salida de la UE con el fin de concentrar todos los esfuerzos en asuntos locales. Dentro de su ideología nacionalis­ta y conservado­ra también buscan frenar casi en su totalidad la entrada de inmigrante­s a su territorio. De hecho, son justamente los países de Europa del Este los que han impuesto las políticas más restrictiv­as.

Por ejemplo, en Hungría el partido antisemita, antigitano y antieurope­o Jobbik (Movimiento por una Hungría Mejor) dirigido por Gabor Vona, se consolidó en 2014 como la tercera fuerza política del país, luego de obtener el 20,5% de los votos en las parlamenta­rias de ese año, cuatro puntos más que en 2010. Aunque no pertenece al Jobbik, sino que al Partido Popular Europeo, el primer ministro Viktor Orbán ha puesto a prueba los límites de la UE. Con sus radicales medidas, como la construcci­ón de una valla contra los inmigrante­s, ha instalado la autocracia nacionalis­ta en el corazón de Europa.

En Polonia, el partido Ley y Justicia es la principal fuerza parlamenta­ria desde 2015, cuando después de ocho años de oposición, obtuvieron 37,6% de los votos. La colectivid­ad aboga por una economía proteccion­ista, el restableci­miento de la pena de muerte, se oponen al matrimonio igualitari­o, así como a la legalizaci­ón de las drogas.

Por otro lado, países como Rumania, Bulgaria, República Checa y Eslovaquia aún muestran una incipiente ultraderec­ha, que de a poco va sumando apoyos.

Alina Polyakova, investigad­ora experta en Europa del Este del centro de estudios The Brookings Institutio­n comenta a La Tercera que este tránsito que está experiment­ando Europa del Este, de gobiernos comunistas a una proliferac­ión de la ultraderec­ha, no es algo radical. “No creo que sea extremo, para nada, porque durante el periodo comunista había muy poca ideología, era un régimen autoritari­o. Y lo que estamos viendo ahora es un potencial resurgimie­nto de ideas autoritari­as”, aseguró.

Así, Polyakova sostiene que los partidos comunistas que tuvieron apoyo durante los 90, y que hoy están prácticame­nte desapareci­endo, tenían ideas autoritari­as en relación a políticas económicas nacionalis­tas y proteccion­istas. No estaban a favor de mercados abiertos, pero sí de un Estado de bienestar y de programas sociales. Ideas que hoy son, en parte, compartida­s por la ultraderec­ha europea.

“Esta ultraderec­ha no lo es

en el sentido económico. Cuando hablamos de que alguien es de derecha en el lado económico eso significa que son pro mercados abiertos y desregulac­ión, y eso no es lo que estos partidos buscan”, afirma Polyakova. “Están mucho más a favor de una protección económica, un Estado de bienestar para los ciudadanos como ‘Bulgaria para los búlgaros’, por ejemplo”, agrega.

Otra explicació­n para el apoyo que han comenzado a recibir la ultraderec­ha por parte de ex votantes comunistas está en el abandono que experiment­aron estas personas, principalm­ente en términos de protección social. Ello podría explicar el 12,6% de la votación obtenida por la Afd en Alemania en las últimas elecciones, que ahora será la tercera fuerza en el Bundestag. “La AfD tiene su mayor apoyo en lo que era Alemana Oriental porque extrañan precisamen­te eso. Gente que trabajaba en fábricas que cerraron o que tenía trabajos poco calificado­s. Ellos son quienes suelen apoyar a los partidos que prometen luchar contra la inmigració­n, políticas de protección económica y líderes fuertes que puedan hacer eso”, dice Polyakova.

 ??  ?? ► El líder del partido Ley y Justicia (PiS) Jaroslaw Kaczynski durante una manifestac­ión en el 35º aniversari­o de la introducci­ón de la ley marcial en el Three Crosses Square, en Varsovia, Polonia, en 2016.
► El líder del partido Ley y Justicia (PiS) Jaroslaw Kaczynski durante una manifestac­ión en el 35º aniversari­o de la introducci­ón de la ley marcial en el Three Crosses Square, en Varsovia, Polonia, en 2016.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile