La Tercera

La trama rusa vuelve a complicar a la Casa Blanca

Tres “pesos pesado” de la campaña de Trump fueron imputados.

- Valentina Jofré

Donald Trump sostiene que se trata de acusacione­s de “años atrás”, pero lo cierto es que la “trama rusa” -la supuesta intervenci­ón de Moscú a favor del actual Presidente en la contienda electoral del año pasado-, ha vuelto a irrumpir en la agenda política estadounid­ense. Ello, después de que tres “pesos pesado” de la campaña de Trump fueran imputados.

Como parte de las primeras acusacione­s formales dictadas por el fiscal Robert Mueller, el ex jefe de campaña de Trump, Paul Manafort, su socio Rick Gates, y el asesor de política exterior de la campaña republican­a, George Papadopoul­os, recibieron sendos cargos.

Manafort y Gates fueron imputados por “conspirar contra Estados Unidos”, lo que se habría traducido en una canalizaci­ón de millones de dólares a través de compañías ficticias extranjera­s, para posteriorm­ente utilizar el dinero para comprar bienes de lujo. Dentro de los 12 cargos en su contra se incluyó el de lavado de dinero, declaracio­nes falsas y engañosas, y la no presentaci­ón de informació­n financiera y de cuentas bancarias en el extranjero. “Manafort utilizó su riqueza escondida en el extranjero para disfrutar de un estilo de vida lujoso en EE.UU. sin pagar impuestos”, sostiene en el escrito de 31 páginas.

En el documento, eso sí, no se menciona directamen­te una supuesta “conspiraci­ón” entre el equipo del Trump y Rusia, sino que los cargos se relacionan con los lazos financiero­s que Manafort y Gates mantuviero­n con líderes prorusos en Ucrania.

Manafort se unió a la campaña de Trump en marzo de 2016 y en agosto tuvo que renunciar después de que saliera a la luz que había recibido US$ 12,7 millones por asesorar al ex primer ministro proruso de Ucrania Viktor Yanukovych. De ahí que el documento señala que “con el fin de ocultar los pagos de Ucrania a las autoridade­s de Estados Unidos, desde aproximada­mente 2006 hasta al menos 2016, Manafort y Gates lavaron el dinero a través de decenas de corporacio­nes, asociacion­es y cuentas bancarias estadounid­enses y extranjera­s”.

El tercer implicado en el caso, que también se dio a conocer ayer, es el asesor de política exterior de la campaña de Trump, George Papadopoul­os.

El 5 de octubre el consejero se había declarado culpable de mentir a los oficiales federales sobre sus lazos con Rusia en una entrevista que mantuvo con los agentes en enero. En efecto, Papadopoul­os tuvo contacto con un profesor ruso que tenía informació­n perjudicia­l sobre Hillary Clinton, en medio de la contienda electoral.

Tanto Manafort como Gates se entregaron al FBI, y comparecie­ron ante la Corte del Distrito de Columbia, donde sus abogados indicaron que ambos se declaraban no culpables de todos los cargos.

Manafort deberá permanecer en arresto domicialia­rio y se le impuso una fianza de US$ 10 millones. Gates también quedó con arresto domiciliar­io luego de pagar una fianza de US$ 5 millones.

Pero el caso salpicó también al Partido Demócrata. Esto, porque Tony Podesta, lobista demócrata y hermano del ex jefe de campaña de Clinton, John Podesta, trabajó con Manafort y Gates con el fin de mejorar la imagen del gobierno ucraniano. Ante esto, Podesta presentó su renuncia ayer a su firma Podesta Group.b

 ??  ?? ► Trump junto a Paul Manafort antes de empezar el cuarto día de la Convención Nacional Republican­a, en Cleveland, Ohio, en julio de 2016.
► Trump junto a Paul Manafort antes de empezar el cuarto día de la Convención Nacional Republican­a, en Cleveland, Ohio, en julio de 2016.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile