¿Pobreza o desigualdad?
SI LA POBREZA ES BAJA ,¿ IMPORTA QUE ALGUNOS TENGAN INGRESOS SUPERIORES QUE EL PROMEDIO? CREO QUE NO. Y EN POBREZA, EL DESEMPEÑO DE CHILE DESDE 1990 HA SIDO ESPECTACULAR.
Me quiero referir a dos temas en esta columna. En primer lugar, ¿cuán cierto es que en Chile la distribución del ingreso ha empeorado desde el retorno a la democracia? ¿Tiene Chile la peor distribución del ingreso del mundo? Ambas aseveraciones –que, por repetidas, se las da por ciertas– son falsas. El coeficiente de Gini (valor de cero para la perfecta igualdad y de 1 para la perfecta desigualdad) ha caído de 0,55 en 1990 a 0,45 en 2015. Asimismo, hay muchos países, aun en nuestra propia región, con coeficientes de Gini muy superiores al nuestro: Brasil y Guatemala, 0.55, Colombia y Honduras, 0,54. De hecho, de acuerdo a Cepal, el promedio regional (0,50) es superior al de Chile. Entre los extraregionales, tenemos a China con 0,57; India, 0,50, y Sudáfrica con 0,62. Esto no significa que estemos bien, pero no estamos mal ni con referencia a los niveles de desigualdad que tuvimos al comenzar los gobiernos de la Concertación ni con respecto a lo que se evidencia en muchos países en desarrollo. Y como lo mostró Harald Beyer en una reciente columna en otro medio, nuestra desigualdad está solo a niveles algo más elevados que el promedio de la Ocde, el grupo de países más ricos del mundo. Interesantemente, la propia Ocde da cuenta de una tendencia hacia una mayor desigualdad en las últimas décadas entre los países más desarrollados del mundo, la cual nosotros no compartimos.
Mi segunda interrogante es: ¿Qué importa más, la desigualdad o la pobreza? El bienestar de las personas de un país está inversamente relacionado con la proporción de hogares que está bajo la línea de pobreza. El ideal es pobreza cero, pero ni los países más avanzados lo han logrado. Si la pobreza es baja, ¿importa que algunos tengan ingresos muy superiores que el promedio? Yo creo que no. Y en pobreza, el desempeño de Chile desde 1990 ha sido espectacular. En los primeros años del retorno a la democracia, Chile tenía un 45% de hogares bajo la línea de pobreza. Hoy está en menos del 15%.
Observemos el binomio pobreza-desigualdad en China. Por lo que nos dicen las cifras internacionales, desde 1980, unos 800 millones de habitantes han salido de la pobreza en ese país. Una proeza que no tiene parangón en la historia de la humanidad. ¿Y la desigualdad? Aunque no tenemos cifras históricas, el Gini de China en estos días es harto más alto que el de Chile. Y el surgimiento de un grupo importante de emprendedores que están entre los más ricos del mundo en un país donde todos eran igualmente pobres antes de 1980 nos indica que se ha dado un fuerte deterioro en la distribución del ingreso. ¿Con qué China se queda usted? ¿Con la equitativa anterior a 1980 donde todos eran pobres, o con la mucho más desigual de hoy, pero con una gran y pujante clase media? No hay por donde perderse. Aunque es difícil saberlo, no me extrañaría que los chinos piensen lo mismo.