Tensión en Medio Oriente por cambio de embajada de EEUU
Trump ya habría informado al líder palestino su decisión de mover la sede diplomática, según la prensa israelí. Según Hamas, decisión “traspasa todas las líneas rojas”. Abbas instó a Rusia, Francia y al Papa a intervenir.
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De nada parecen haber servido los llamados de la Unión Europea de resolver el tema “mediante negociaciones” ni el telefonazo del Presidente francés, Emmanuel Macron, manifestándole su “preocupación”. Mucho menos las súplicas o amenazas de la práctica totalidad de los países musulmanes. Según informó ayer The New York Times, el Presidente de EE.UU., Donald Trump, se habría comunicado con los líderes de Palestina, Israel, Jordania, Arabia Saudita y Egipto para informarles de su decisión de declarar hoy a Jerusalén como capital de Israel, así como del traslado de la embajada norteamericana de Tel Aviv a esta ciudad, medida que se postergaría seis meses solo por “motivos logísticos”.
Los palestinos reclaman Jerusalén Este como la capital de su futuro Estado, un territorio que Israel ocupa desde 1967. Hasta el momento, ningún país tiene su embajada en Jerusalén, sino en Tel Aviv, mientras que Israel reivindica la ciudad santa como su “capital eterna e indivisible”.
Si bien el eventual traslado de la embajada estadounidense a Jerusalén fue acordado por el Congreso en 1995, desde entonces todos los mandatarios norteamericanos han postergado la decisión a través de la firma de una enmienda, esgrimiendo razones de “seguridad nacional”. Pero esa tradición se rompería con el anuncio que Trump se apresta a efectuar hoy, según confirmó la Casa Blanca, dos días después de la expiración del plazo para decidir si mantiene la embajada en Tel Aviv.
Trump ya habría comunicado su decisión al Presidente palestino Mahmoud Abbas y al rey Abdalá II de Jordania, así como al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, el Presidente egipcio Abdelfatah Al-Sisi y al rey de Arabia Saudita, Salman bin Abdelaziz, según el diario israelí Haaretz. A juicio del Times, la eventual decisión de Trump representa un “simbólicamente tenso
movimiento que suspenderá décadas de política estadounidense y alterará los esfuerzos para promover la paz entre Israel y los palestinos”.
Un análisis compartido por varios líderes de la región. “Es una medida que encenderá el extremismo. Viola
los propios compromisos de EE.UU. con el proceso de paz y significa el cruce de una línea roja, no sólo para los palestinos, sino también para el mundo árabe y musulmán”, dijo a La Tercera, Saeb Erekat, secretario general de la OLP.
“Tras su conversación con Trump, Abbas habló con los Presidentes de Rusia y Francia, con el Papa y con el rey de Jordania. Les dijo que esta decisión es rechazada y los instó a intervenir para evitar que ocurra”, señaló el portavoz de Abbas, Nabil Abu Rudeina, según Reuters.
El rey de Arabia Saudita, por su parte, advirtió que “este paso peligroso es provocador para los sentimientos de todos los musulmanes del mundo, debido al lugar destacado que ocupa la mezquita de Al Aqsa” de Jerusalén. Podría desatar “la cólera de los musulmanes en todo el mundo”, comentó.
El canciller jordano, Ayman Safadi, dijo ayer que su país convocará para el sábado una reunión de emergencia de la Liga Árabe ante la decisión de Trump. Ayer mismo, el Presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció que Turquía citará a una cumbre de la Organización de Cooperación Islámica en Estambul si EE.UU. reconoce a Jerusalén como capital israelí.
En la misma línea, el Presidente Abdelfatah Al-Sisi ratificó “la posición sin cambios de Egipto sobre el hecho de que se debe preservar el estatus jurídico de Jerusalén”, informó la televisión egipcia.
En una carta enviada a los dirigentes árabes y musulmanes y publicada por el movimiento islamista, el líder de Hamas, Ismail Haniyeh, declaró que el eventual reconocimiento de Jerusalén como capital israelí y el traslado de la embajada de EE.UU. “traspasa todas las líneas rojas”.
Hamas llamó a los palestinos a manifestarse este viernes, que proclamó como “día de la cólera”. Netanyahu dio instrucciones a los responsables de las FF.AA. israelíes para el envío de efectivos. En tanto, ya se blindó la protección de las sedes diplomáticas estadounidenses en Israel. El departamento de Estado prohibió ayer a sus empleados todo desplazamiento a la Ciudad Vieja de Jerusalén debido a las manifestaciones palestinas.b