Quintanilla tropieza y Loeb se va
Problemas mecánicos bajaron al chileno del segundo al noveno lugar.
No fue un buen día para Pablo Quintanilla en el rally Dakar. En la quinta especial, disputada ayer entre San Juan de Marcona y Arequipa, sufrió algunos incidentes, como una caída en la playa y problemas con su moto, dificultades que hicieron imposible sus aspiraciones de mantener o mejorar el segundo lugar que ocupaba en la general.
Quintanilla finalizó la etapa en la decimosexta posición y, luego de conocer los resultados, el piloto conversó con los medios y señaló: “En un momento vi la situación bien complicada, estaba a tres kilómetros de la meta y la moto no andaba, tenía problemas con la bomba de bencina”. Además, agregó: “Fue una especial bien agotadora, en donde había que ir muy tenso arriba de la moto, se movía mucho por las piedras (...) Sin lugar a dudas, ha sido la etapa más difícil del Dakar”.
Así, bajó al noveno lugar en la general. Por último, declaró: “Las dunas están muy blandas, la moto se entierra, me quedé atascado varias veces, te vas enterrando y tienes que buscar la línea”.
Casale, firme
Quien sí continuó conservando una posición de privilegio fue Ignacio Casale. Finalizó segundo en el tramo, con lo que sigue liderando la tabla general.
La etapa la ganó el argentino Nicolás Cavigliasso, quien llegó con un minuto de ventaja sobre el nacional. Casale reafirma su condición de candidato gracias a sus números, su- mado al retiro del actual campeón, el ruso Sergei Kariakin, quien se fracturó un brazo tras caer de su cuatriciclo cuando llegaba al kilómetro 44.
En autos, en tanto, el binomio chileno-peruano de Juan Carlos Vallejo y Leonardo Baronio sigue: se quedó sin tracción al salir, por lo que regresó al vivaq. Se mantendrá en competencia, pero con una penalización aún no determinada.
La jornada sufrió, además, la baja de una leyenda: el francés Sébastien Loeb no pudo continuar debido a que su copiloto, Daniel Elena, sufrió una lesión en el coxis. “Puedo estar de pie, pero me resulta imposible sentarme”, dijo el navegante monegasco, socio eterno del alsaciano, con quien ganó nueve veces el campeonato del mundo de rally.
Además, la dupla de Peugeot se vio retrasada en más de dos horas al caer en una trampa de arena. “Delante nuestro, en la cresta de una duna, había un camión. Lo adelante y giré; me encontré de golpe con un hoyo de tres metros. No pudimos hacer nada”.