Augusta espera a Joaquín Niemann

Joaco ganó de manera brillante en el Country Club con cinco golpes de ventaja. En abril disputará el Masters, será el primer chileno en la historia en jugar dos majors.

Joaquín Niemann tuvo suerte ayer, pero eso apenas fue parte de la jornada de gloria que vivió en el Country Club. El chileno, ranqueado uno en el escalafón amateur mundial, peleaba codo a codo con Toto Gana, con el mexicano Álvaro Ortiz, con el argentino Jaime López Rivarola y con varios otros los primeros puestos del Latin America Amateur Championship. Palo a palo, hasta que llegó el tiro que le sacó una de sus esquivas sonrisas.

Hoyo ocho, par cuatro, tiro desde el tee que apuntó a la izquierda, pero que se le fue a la derecha. Maldice (seguramente, pues no dijo nada), pero no se da cuenta de que su bola rebotaba en un árbol y quedaba mansa en el green, pintada para eagle. Joaco no desperdició el regalo y ahí comenzó otro torneo, uno para decidir al segundo.

Ese águila no le dio el título a Niemann. Lo que le dio fue la confianza y una alegría de jugar que más de una vez había perdido en las cuatro rondas del campeonato. Ese rebote en el árbol no fue más que el inicio de una de las jornadas más brillantes que se haya visto en el club de La Reina: al eagle le siguieron birdies desde la bandera 9 a la 12 y también en la 14, donde “se detuvo”.

“En el único hoyo que sentí nervios fue en el green del 11, pero una vez hecho el putt me solté y seguí jugando muy bien. Pensé que iba a hacer birdies hasta el 18”, reconoció Joaco.

En ese momento les había sacado cinco y hasta seis golpes a los escoltas, esos que peleaban el segundo puesto (que también daba cupos para otros torneos y clasificaciones).

Niemann enfrentó con esa tranquilidad la última parte del campo, los cuatro hoyos finales que destruyeron ilusiones a muchos. Cuatro pares y a celebrar. El título era suyo, con 63 golpes ayer, un nuevo récord personal para el campo.

“El primer día fue el único en que no me sentí bien, el resto aunque no siempre jugué bien, me sentía tranquilo, con buena actitud”, señaló.

El talagantino encabezó un gran LAAC para Chile, con un sorprendente Gabriel Morgan (estuvo a un golpe de ser segundo) y un Toto Gana que no pudo cerrar un torneo donde también tuvo opciones de victoria.

Un título esquivo para Niemann, con varios e importantes coronas internacionales, que había sido 31º en 2015; tercero en 2016 y segundo (en desempate) el año pasado en los LAAC.

Niemann clasifica así al Masters de Augusta, en abril, donde enfrentará por segunda vez un major, tras el US Open 2017 al que accedió en la clasificatoria a la que llegó gracias al segundo lugar en el LAAC de ese año. De los seis chilenos que han jugado un major, Niemann es el primero que jugará dos. Probablemente sean muchos más.b