NUEVO INTENTO DE REFORMAS DEL SISTEMA DE PENSIONES
SEÑOR DIRECTOR
Se ha anunciado la presentación en este año de un nuevo proyecto para reformar el actual sistema de pensiones que surge del Decreto ley 3.500 aprobado en una sesión secreta de la junta militar de gobierno de agosto de 1980. El sistema actual se ha tratado de reformar, sin mayor éxito, en varias ocasiones. Se han nominado dos comisiones presidenciales (Marcel 2006-08 y Bravo 2014-15), un comité de ministros sesionó entre 2015 y 2016 y la “ley Valdés” (Hacienda) fue presentada en el 2017. El sistema actual adolece de problemas múltiples que difícilmente se arreglarán con “cirugía menor”: bajas pensiones para el grueso de la población, altas utilidades de los administradores del mismo, las AFP, utilización de los fondos de pensiones de los asalariados para financiar grandes empresas, enormes diferencias de beneficios por género y entre el pilar privado de las AFP, Capredena y Dipreca , vulnerabilidad a fluctuaciones de los mercados de capitales, ausencia de aporte del empleador a las pensiones de sus empleados y trabajadores, falta de criterios de inversión socialmente responsable de los fondos de pensiones y otros.
¿Por qué los diversos intentos de reforma de pensiones no han logrado revertir los problemas mencionados? Fundamentalmente porque se han autoimpuesto metas limitadas, introduciendo algunos elementos necesarios de cambio pero sin afectar a los que realmente se benefician con el actual sistema (el gremio de las AFP y el estamento militar). El nuevo gobierno tiene la oportunidad de dar dos pasos centrales: fin de la exclusividad de las AFP y reformas serias a Capredena y Dipreca. Un referéndum ciudadano sería un camino democrático apropiado para enfrentar una genuina reforma del sistema de pensiones que corra mejor suerte que los intentos ya realizados. Andrés Solimano Doctor en Economía, MIT. Autor de Pensiones a la chilena