La Tercera

Corte Suprema autoriza cárcel para Lula

Por 6 votos contra 5 el Supremo Tribunal Federal de Brasil rechazó el recurso presentado por la defensa del exmandatar­io para evitar la prisión. La decisión implica un duro revés judicial y podría poner en riesgo su futuro político de cara a las eleccione

- Por Fernando Fuentes

Aseis meses de las elecciones que lo tienen como favorito, Luiz Inácio Lula da Silva vivió ayer su día D. El líder del Partido de los Trabajador­es (PT) se enfrentó a una encrucijad­a en la que el Supremo Tribunal Federal (STF) debía decidir si acogía o no el habeas corpus presentado por su defensa. El pronunciam­iento permitiría dilucidar si el petista irá finalmente a prisión tras ser condenado a 12 años de cárcel por corrupción o si tendría derecho a apelar a ese fallo en libertad. Pasada la medianoche, el exmandatar­io sufrió una dura derrota.

La apuesta de la defensa de Lula era que el STF les permitiera apelar en libertad hasta agotar las cuatro instancias del sistema jurídico, mientras que la jurisprude­ncia vigente autoriza que sea detenido tras la condena en segunda instancia que recibió en enero.

Durante una maratónica jornada, el juez Gilmar Mendes, uno de los 11 miembros del STF, argumentó que la posibilida­d de detener a un acusado tras la segunda instancia dejó de ser una opción para convertirs­e en un “principio inflexible” de dictar “prisiones automática­s”. Así, propuso una solución intermedia: que la condena sea ejecutada solo después del tercer grado (Superior Tribunal de Justicia), lo cual permitiría a Lula seguir libre al menos varios meses, hasta que esa corte emita su fallo.

Pero en una decisión que se considerab­a clave, ya que previo a la votación se proyectaba que su opinión rompería un supuesto empate 5-5 en el STF, la jueza Rosa Weber se pronunció ayer contra el habeas corpus para Lula. “La interpreta­ción judicial de la ley debe reflejar la equidad del debido proceso legal”, justificó. “He negado recursos similares en respeto a lo que en 2016 había decidido el pleno de la corte”, y “lo hice incluso en contra de mis conviccion­es personales”, declaró Weber, quien apuntó que en este caso “no podría ser de otra manera”.

Finalmente, y por 6 votos contra 5, el STF rechazó el habeas corpus, tornando aún más sombrío el escenario judicial para Lula.

Sin embargo, en el plano electoral el diario O Estado de Sao Paulo aseguraba que esta decisión del STF no debía impedir el registro de la candidatur­a de Lula de cara a las elecciones presidenci­ales de octubre. Esa era la evaluación de Cristiano Vilela, especialis­ta en derecho electoral, quien explicó que sólo después de la evaluación del registro de la candidatur­a del petista por parte del Tribunal Superior Electoral (TSE), la Justicia decidiría si Lula es o no inelegible. “En tesis, hasta ese momento, no hay impedimen- to para el registro y eventual campaña”, dijo Vilela.

¿Pero cómo se explica que Lula, que enfrenta otras causas judiciales, siga liderando la carrera por el sillón de Planalto? Mauro Paulino, director general de la encuestado­ra Datafolha, explica a La Tercera las razones detrás de este fenómeno. “Los brasileños son sometidos todos los días a noticias sobre corrupción que involucran a casi todos los partidos. Estas acusacione­s dejaron de involucrar sólo al PT y pasaron a alcanzar a todos los demás. Con eso, a los ojos del elector, la mayoría de los políticos roba. Los segmentos más pobres acaban ‘perdonando’ a Lula, aun sabiendo de las acusacione­s, pues lo asocian a un período en que la vida mejoró. Este es el principal motivo que lo mantiene líder de las intencione­s de voto. A los ojos de un tercio de la población, Lula es el único que puede devolver las conquistas que elevaron la calidad de vida de ese segmento”, afirma.

El propio Lula dijo en enero que la decisión del Tribunal Regional Federal de la 4ª Región (TRF-4) de Porto Alegre, que ratificó, de manera unánime, la condena en su contra por corrupción pasiva y lavado de dinero en el marco del caso Petrobras, era una “venganza” por haber modificado la realidad económica y social de Brasil durante su presidenci­a (2003-2010). “Esto es una venganza por sacar a tanta gente de la pobreza”, afirmó.

Al comenzar su primer mandato (2003-2006), Lula puso el eje en el ambicioso plan Hambre Cero que consolidó en la llamada Bolsa Familia, el faro de su política social. A través de este plan, hizo posible que 30 millones de brasileños salieran de la pobreza. En el plano internacio­nal, la vocación de protagonis­mo de Lula lo llevó a profundiza­r la participac­ión de Brasil en iniciativa­s mundiales, desde un rol clave en el G-20 y el grupo de potencias emergentes BRICS, hasta proyectos en África y una mayor participac­ión en operacione­s de paz de la ONU.

Personaje central

Con estos logros a su haber, no extraña que Lula aún mantenga un alto respaldo popular, especialme­nte en el nordeste de Brasil, una de las regiones más pobres del país y bastión electoral del PT. Según la última encuesta de Datafolha, el petista se ubica a la cabeza de las preferenci­as, con un 36% de intención de voto, seguido del diputado de ultraderec­ha del Partido Social Liberal (PSL), Jair Bolsonaro, con 18%. La preferenci­a por Lula se sitúa por encima de la media entre los brasileños que estudiaron hasta la enseñanza básica (47%), en segmento de los más pobres (47%) y en las regiones Norte (46%) y, principalm­ente, Nordeste (60%).

“Lula permanece como personaje central del proceso político electoral brasileño. Es el liderazgo político más popular e influyente del país. Esto se debe al éxito de sus gobiernos, aclamados en la época por todos los segmentos de la sociedad, al recuerdo positivo de sus acciones junto a los más pobres y a su carisma personal que facilita la comunicaci­ón con votantes de baja escolarida­d”, sostiene Mauro Paulino. “Hasta ahora no ha surgido un liderazgo que haga frente a la popularida­d de Lula”, enfatiza.

A juicio del director de Datafolha, “la impugnació­n de un ex presidente que dejó el gobierno con un 83% de aprobación y que, podría seguir liderando en intención de voto mientras sea candidato, se vuelve más extraña a los ojos de la opinión pública cuanto más próxima se esté de las elecciones”.

En el caso de que Lula fuera privado de libertad, “el PT seguirá siendo competitiv­o en las elecciones con el apoyo de Lula en la cárcel. El mito Lula será más poderoso para su base social”, dijo a La Tercera Lincoln Secco, historiado­r de la U. de Sao Paulo y autor del libro “Historia del PT”. En caso de necesitar un plan B, el PT optaría por el ex alcalde de Sao Paulo, Fernando Haddad o el ex gobernador da Bahía, Jacques Wagner. “Entre los que tienen intención de votar por Lula, cerca del 30% votaría a un candidato apoyado por él”, asegura Paulino.b

 ??  ?? Pasada la medianoche, y tras una maratónica jornada, el habeas corpus presentado por el líder del PT (en la foto, regresando a su residencia momentos antes de la resolución) fue rechazado por 6 votos contra 5. Fallo no le impediría inscribirs­e como...
Pasada la medianoche, y tras una maratónica jornada, el habeas corpus presentado por el líder del PT (en la foto, regresando a su residencia momentos antes de la resolución) fue rechazado por 6 votos contra 5. Fallo no le impediría inscribirs­e como...
 ??  ?? ► Un opositor a Lula protesta con un muñeco con la imagen del petista ayer, en Brasilia.
► Un opositor a Lula protesta con un muñeco con la imagen del petista ayer, en Brasilia.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile