El déficit de los hospitales llega a US$ 1.000 millones
Deuda de 2017 marcó récord y llegó a $ 625 mil millones, poco más del costo de hacer las 289 mil cirugías pendientes. Salud proyecta que, de no contenerse el gasto, mora podría llegar a los mil millones de pesos este año.
El déficit operacional de los hospitales del país marcó un nuevo récord en 2017: llegó a $ 625 mil millones, es decir, US$ 1.000 millones, ubicándose como el más alto de la historia. Esta cifra, que se explica por problemas estructurales y de gestión, supera levemente los $ 511 mil millones que costaría resolver toda la lista de cirugías No Auge -de acuerdo al estudio que como académico de la U. de Chile realizó el actual ministro de Salud, Emilio Santelices-, permitiendo una solución definitiva a los 289 mil pacientes que por años han aguardado ser operados.
“Las cifras son muy evidentes. Son lo que realmente cuesta resolver la lista de espera quirúrgica en Chile y se explica porque nunca se ha querido abordar la brecha estructural dentro de los servicios de salud”, dijo el diputado (PS) Juan Luis Castro, presidente de la Comisión de Salud de la Cámara.
Héctor Sánchez, director de la Escuela de Salud Pública de la U. Andrés Bello, añade que “lo que se constata con los datos es que efectivamente el sector sigue mostrando una indisciplina fiscal. Uno puede observar que no han cumplido la función de ser responsables con lo que se gasta y exigir a los directores de hospitales y de servicios que gasten lo que está presupuestado”.
De acuerdo a las cifras de la Subsecretaría de Redes Asistenciales, para evitar que este nivel de endeudamiento pusiera en riesgo la continuidad de la atención, el año pasado la red de centros de salud recibió aportes desde Hacienda que totalizaron $ 349 mil millones, lo que permitió cerrar el año con una mora de $ 246.934 millones (ver infografía).
En tanto, el mayor gasto de los hospitales se concentra en las áreas de recursos humanos y compra de bienes y servicios. Se trata de ítems donde se cuestiona la eficiencia en la gestión de los recintos, por ejemplo, en el pago a sociedades médicas por prestaciones que deberían realizarse en horario hábil, a precios menores, o compras directas de fármacos, cuyo costo disminuye considerablemente cuando se realiza a través de la Central Nacional de Abastecimiento (Cenabast). De hecho, según el estudio que realizó esta entidad, los hospitales podrían ahorrar en torno a los $ 30 mil millones al año si programaran sus compras.
Los expertos, además, sostienen que otro factor que influye en el déficit es el sistema de financiamiento, ello, pues se entregan recursos para financiar prestaciones cuyos aranceles, fijados por Fonasa, son antiguos y no se ajustan a los costos reales del mercado. Esto quiere decir que, por ejemplo, si una cirugía le cuesta al hospital $ 150 mil, al estar subarancelada el retorno de recursos estatales será de solo $ 100 mil, generando un delta de $ 50 mil.
Preocupación
El nivel de endeudamiento preocupa a las autoridades, tras el fracaso de las medidas implementadas para contenerlo. El subdirector de Presupuestos del Ministerio de Hacienda, Guillermo Pattillo, explicó que más allá del abultamiento de la cifra, lo más complejo es que “esto es insostenible, ya que crece de forma persistente, no ha habido manera de modificar esa tendencia y, por lo tanto, no es viable”.
Según Pattillo, al ser un problema estructural del sistema, las soluciones “no son fáciles”, ni se implementan de un día para otro: “No es la solución ajustar dos o tres elementos de gestión mínimas y resolver el problema, sino que es mucho más profundo y requiere que todos los actores involucrados se sienten a repensar cómo se gestiona la salud finalmente en Chile”.
El ministro de Salud, Emilio Santelices, adelantó que “los equipos financieros están analizando las cifras para ver
“Los equipos financieros están analizando cifras para ver cómo resolver”.
cómo se resuelve el problema. Estamos analizando los datos para abrir cada una de las cuentas y ver cuáles dan fundamento a este incremento. No es posible adelantarnos a qué intervenciones vamos a realizar por el momento, porque estamos recién revisando las causas”.
En tanto, considerando los datos de enero a marzo, el Ministerio de Salud ya realizó una proyección del déficit si este no lograra ser contenido. El análisis revela que la deuda hospitalaria llegaría a los mil millones de pesos, que se desglosan en poco más de $ 700 mil millones de deuda hospitalaria y otros $ 200 mil millones por gastos de Fonasa.
Para el ex subsecretario de Redes y actual profesor titular de la UC, Luis Castillo, el sistema de los servicios de salud requiere de una reforma estructural definitiva. “Se debe ir al fondo del problema para lograr cambios. Hay que poner a profesionales en la gestión a cargo de los hospitales para gestionar compras de forma razonable y eficiente y en mandos medios a expertos en administración y manejo de recurso humano especializado. También a buenos gestores clínicos, que permitan dar accesibilidad y oportunidad para que las personas que tengan problemas de salud pendientes se puedan atender. En el corto plazo elevar y mejorar los niveles de gestión, mientras se trabaja en una reforma más de fondo”
Por su parte, Jaime Bellolio (UDI), diputado de la Comisión de Salud de la Cámara, planteó que “es necesario hacer ese cambio en la gestión hoy, de manera de cubrir no sólo la deuda, sino también poder detenerla para no tener un sistema desfinanciado que le falla a los pacientes”.
EMILIO SANTELICES MINISTRO DE SALUD
“Es insostenible. No ha habido manera de modificar la tendencia”.
GUILLERMO PATTILLO SUBDIRECTOR DIPRES