Cruzados cambia en la cabecera
En medio de la lucha que sostiene con la U por la cima del torneo nacional, la UC de Beñat San José sale a enfrentar a O’Higgins con la misión de ponerle presión a los azules, pero también con cambios en el plano dirigencial.
Pasa que el próximo martes se celebra la junta ordinaria de accionistas de Cruzados, donde, entre otras cosas, se deberá aprobar el balance general, la remuneración del directorio y la designación de auditores externos. También la elección (o ratificación) de los directores para un nuevo periodo. Ahí es donde se modificarán de nombres.
Según el artículo 73 del Reglamento de la ley de Sociedades Anónimas, la concesionaria debe anunciar con antelación a la junta la lista de candidatos a director que ya aceptaron su nominación y que además no tienen problemas para desempeñar el cargo. Hay diez nombres que se mantienen y uno que cambia: Luis Larraín, presidente de Cruzados desde abril de 2014 hasta junio de 2016, saldrá del directorio estudiantil “por motivos personales”, según cuentan en la precordillera, tal como los que adujo cuando abandonó la testera del club y lo reemplazó Juan Tagle. Su puesto, previa aprobación de la junta, será tomado por Martín del Río, hijo de Felipe del Río, quien a su vez es hermano de Juan Pablo, actualmente en el directorio del elenco universitario.
La salida de Larraín no implica movimiento de acciones, toda vez que estaba ahí por el Club Deportivo, que además del asiento seguro en la mesa directiva por la sesión de derechos de imagen, posee un porcentaje de acciones que le permite otro puesto.
En lo futbolístico, Beñat volvió a prescindir, por segundo partido, del capitán Cristián Álvarez. Además, la lesión de Voboril obliga a Beñat a improvisar un lateral izquierdo.b