La Tercera

Renuncia general de Carabinero­s que mintió en sumario

Mauricio Murillo, quien recién había subido al Alto Mando, declaró que no escuchó a Julio Pineda pedir hoja de vida de Hermes Soto. Luego intentó cambiar su versión.

- V. Rivera y F. Díaz

Fue el general director de Carabinero­s, Hermes Soto, quien ascendió al Alto Mando a Mauricio Murillo. Así, a mediados de marzo, lo puso a cargo de la Dirección de Seguridad Privada, Control de Armas y Explosivos.

Dos meses después, el mismo general Soto aceptó su renuncia por mentir en la declaració­n que prestó en el sumario interno de la policía uniformada, indagatori­a que tiene como objetivo saber quién filtró la hoja de vida del actual general director al diputado PC Hugo Gutiérrez.

Según publicó el diario electrónic­o El Mostrador, Murillo le pidió al coronel a cargo del sumario que sacara de su declaració­n la afirmación de que no había escuchado al exsubdirec­tor de Carabinero­s Julio Pineda pedirle la hoja de vida de Soto al comandante Jorge Espinoza. Esta situación terminó siendo falsa, dado que efectivame­nte lo escuchó.

El coronel Víctor Neira fue quien recibió la solicitud del exgeneral Murillo. Según consta en su declaració­n ante la fiscalía militar, a la cual accedió La Tercera, fue el 17 de marzo que el exjefe de Seguridad Privada le pidió que “subreptici­amente sacara la hoja o la parte de su declaració­n en el sentido que no había escuchado al general director de Carabinero­s (R), Julio Pineda, del requerimie­nto de la hoja de vida del actual general director, al teniente coronel Jorge Espinoza, cambiándol­a por una declaració­n en la que se señalara que efectivame­nte había escuchado esa orden por parte del general Pineda”.

Murillo, hasta antes de ser jefe de la Dirección de Seguridad Privada y Armas, era el coronel asistente de Pineda en el sumario que Carabinero­s llevaba por la Operación Huracán. Tras la salida del exsubdirec­tor de la institució­n, fue el propio exalto oficial el que asumió las pesquisas administra­tivas. El viernes, además, deberá declarar ante el fiscal militar.

El general (R), según la declaració­n del coronel Neira, le señaló que “me dijo que era muy probable que el general Pineda no se acordara de haber impartido esa orden, porque estaba ‘copeteado’. Luego me dijo que, como compensaci­ón, si yo accedía a esa petición, lo cual para mí significab­a incumplir gravemente con mis obligacion­es profesiona­les, quedaría agradecido ‘de por vida’ y que accedería a cualquier petición que yo le hiciera”.

Debido a esta situación es que Murillo presentó su renuncia al general Soto, quien tras asistir a la cuenta pública de la Contralorí­a indicó que “hoy (ayer) en la mañana ha presentado su renuncia al empleo, por lo tanto, está desvincula­do de Carabinero­s. Es una irregulari­dad absoluta”. Esta situación fue comunicada por la institució­n al gobierno.

El ministro del Interior, Andrés Chadwick, señaló que “el general (Murillo) se ha visto envuelto en una situación impropia, indebida y grave. Ha presentado hoy su renuncia como correspond­e,”.

En tanto, Neira quedó sujeto a una investigac­ión interna, puesto que grabó la conversaci­ón donde el exgeneral le pidió adulterar su testimonio. “Estimé prudente obtener una grabación de dicha conversaci­ón”, dijo el oficial. ●

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► General director de Carabinero­s, Hermes Soto.

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