Trump propone recortes de fondos a clínicas abortistas
Según The New York Times, la Casa Blanca busca resucitar una política instituida en 1988 por Reagan.
En un nuevo guiño a los sectores más conservadores, la administración del Presidente estadounidense Donald Trump se dispone a resucitar una norma de la era Reagan que prohibiría que las clínicas de planificación familiar financiadas con fondos federales discutan sobre el aborto con mujeres o compartan el espacio con proveedores de servicios de aborto, según informó el diario The New York Times, que citó a tres fuentes oficiales.
La política, afirma el periódico, sería un retorno a una instituida en 1988 por el Presidente Ronald Reagan, según la cual los servicios de aborto requerían de una “separación física” y “de personal” del resto de las actividades relacionadas con la planificación familiar.
La política fue rescindida por el Presidente Bill Clinton y entró en vigencia una nueva norma que requería asesoramiento “no directivo” para incluir una gama de opciones para las mujeres. De acuerdo con la prensa norteamericana, la nueva propuesta revertirá el requisito de Clinton de que el aborto se debata como una opción junto con la atención prenatal y la adopción.
Sin embargo, antes de proceder al recorte de fondos, el gobierno de Trump daría la opción a los centros de mantener la percepción de las ayudas en el caso de que decidan renunciar a esa labor.
Las nuevas medidas impulsadas por Trump responden a las demandas de los grupos más conservadores dentro del Partido Republicano, que reclaman un mayor control de las actividades abortivas. Aunque las leyes federales actuales ya prohíben destinar fondos a centros que usan el aborto como método de planificación familiar, organizaciones como el Planned Parenthood, la más importante en Estados Unidos, han mantenido esa actividad y recibido hasta la fecha cuantiosas ayudas.
En ese sentido, The New York Times destacó que Trump se ha enfocado particularmente en Planned Parenthood, que atiende al 41% de las mujeres que reciben servicios de planificación familiar financiados con fondos federales. El año pasado firmó una legislación para recortar el dinero gubernamental del grupo y otros que realizan abortos.
Los médicos han expresado su alarma ante la perspectiva de tales cambios a las reglas federales de planificación familiar. En una conferencia telefónica este mes, funcionarios del Colegio Estadounidense de Médicos y el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos dijeron que la política de Trump dañaría la salud de las mujeres, consignó el Times.b