Un epílogo con goles y peleas
De haber sido una película, habría sido suficiente comenzar a verla en los últimos minutos. Tras 85’ sin gran atractivo, el duelo entre Iquique y Audax agarró sobre el final toda le emoción que le había faltado. Fue tanto, que se jugaron 13 minutos de descuento, que terminaron en el 1-1.
Audax llegaba angustiado por la tabla. Iquique lo recibía con cierta tranquilidad por el buen trabajo que ha realizado Miguel Riffo desde que llegó a la banca. En ese escenario se le vino el mundo abajo a los itálicos, cuando a cinco del final quedaron en desventaja. Volvieron a respirar con el empate en los descuentos… Y hasta ahí llegó el fútbol para dar paso a las peleas, empujones y expulsiones.
Hasta los cuerpos técnicos se metieron, un poco para calmar, un poco para responder en un tumulto en el que estaban todos: los que estaban jugando, los de la banca, todos.
Así llegó el final de la película, aunque la primera crítica a lo visto en Cavancha llegó de un protagonista. “Estas cosas no deben pasar, los que estamos en la cancha debemos ser los primeros en dar el ejemplo”, dijo con sinceridad el volante celeste Diego Torres. ●