Sistema frontal con viento y lluvia dará paso al frío en zona central
La Dirección de Meteorología pronosticó precipitaciones de menor cuantía entre las regiones de Coquimbo y O’Higgins para esta madrugada.
El sistema frontal que se registró hasta ayer en la zona central dará paso a las bajas temperaturas desde la Región de Coquimbo hasta el Biobío. Así lo señaló la jefa de turno de la Dirección de Meteorología (Meteochile), Edita Amador, quien precisó que para esta jornada Santiago registrará un día nublado con temperaturas extremas de ocho grados la mínima y 14 grados la máxima, con lluvias durante la madrugada.
Agregó que para el jueves habrá tres grados como mínima en la capital, mientras que el viernes será de un grado sobre cero. El sábado habrá 20 grados de máxima.
El director de la Onemi, Ricardo Toro, en su informe diario, detalló que el frente de mal tiempo provocó que 7.200 clientes quedaran sin suministro de agua en los altos de Tomé, Región del Biobío. Otro de los efectos fue el cierre de todos los puertos para embarcaciones en la zona central. La autoridad anunció, además, un monitoreo permanente en sectores precordilleranos y que el acceso San Gabriel, del sector San José de Maipo, queda restringido al paso de turistas.
A nivel de regiones, según Meteochile, habrá precipitaciones de menor cuantía en algunos sectores interiores de La Serena, la zona cordillerana de Valparaíso y en la Región de O’Higgins.
Para la Cuarta Región se pronosticó lluvia para esta madrugada en Illapel y en la tarde en Vicuña y Ovalle, mientras que el mismo fenómeno se anunció para la zona montañosa de la Región de Valparaíso.
Edita Amador explicó que el sistema frontal varió en su extensión, pues al mediodía de ayer cubrió desde Valparaíso a la zona de O’Higgins y en las últimas horas del martes se amplió desde el sur de la Región de Coquimbo hasta el Maule. En la zona central, en tanto, las lluvias acumularían hoy de tres a cinco milímetros, que se suman a los más de 7,1 mm registrados hasta ayer.
Panorama en regiones
En general, la Región de Valparaíso sorteó el primer temporal del año, siendo el sector alto del puerto, Faro Panul, donde se registró el máximo de agua caída, con 52,5 mm. A eso de las 16 horas bajaron las precipitaciones.
En cuanto a situaciones de emergencia, hubo al menos 10 choques por alcance y congestión vehicular de hasta una hora en el sector recta Las Salinas, ya que su ducto colapsó, generando una inundación que debió ser atendida por personal municipal, del Serviu y de la Armada.
Si bien el temporal no pasó a mayores, hubo al menos unas 900 viviendas que tuvieron interrupción de suministro eléctrico.
El gerente de ingeniería y operaciones de Chilquinta, José Morales, indicó que “tuvimos 300 reclamos, por clientes afectados en Valparaíso, Concón y El Belloto”.
Más al sur, en la Región del Maule, se registraron vientos de hasta 70 km/h en sectores costeros y cordilleranos, ocasionando caídas de ramas y árboles sobre el tendido eléctrico, por lo que 11.800 hogares, es decir, el 2,3% del total regional sufrió cortes de energía eléctrica en las comunas de Empedrado, San Javier, Teno, Constitución, Río Claro y Cauquenes.
Debido a esto, la empresa CGE ordenó el despliegue de sus brigadas destinadas a la normalización del suministro y dispuso generadores móviles para casos prioritarios de provisión de energía, en especial de pacientes electrodependientes.
Los 23,5 mm de lluvia caída en Talca; 27,5 en Curicó, 35 mm en Cauquenes y 32 mm de agua caída en Linares solo ocasionaron anegamientos de calles y pasos niveles, además de filtraciones de viviendas, en diferentes comunas. Hasta ayer no se registraban casas inundadas, anegadas ni personas damnificadas.
En la Región del Biobío, específicamente en Tomé, los fuertes temporales provocaron la suspensión de clases en cinco establecimientos, el corte de agua en al menos 18 puntos y 60 viviendas afectadas por el agua y el barro.
Desde el día lunes hasta la madrugada de ayer, las intensas lluvias provocaron el desborde de cuatro esteros que cruzan la ciudad. Esto derivó en el colapso de los colectores de agua, lo que generó la inundación de calles y viviendas. Además, se produjeron deslizamientos que afectaron a una vivienda y una planta de Esbbio. ●