VIH Y RETOS PARA LA SALUD PÚBLICA

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Un reportaje de este medio mostró el preocupante aumento de casos de VIH en el país, una fracción de los cuales corresponde a ciudadanos extranjeros, quienes principalmente reciben tratamiento en la red de salud pública.

Este antecedente permite poner en perspectiva -una vez más- la importancia de un debate amplio cuando se aborda la temática de la inmigración. Es así como la dimensión de la salud pública muchas veces está ausente de esta discusión, en circunstancias que constituye una variable muy relevante.

Al asumir el reto de regularizar la inmigración, es fundamental que dentro de la discusión sobre su alcance estas consideraciones sean ponderadas y tomadas en cuenta, ya que es necesario contar con los recursos suficientes para que quienes optan por vivir en el país puedan acceder a las mismas condiciones que los demás ciudadanos. En un sistema altamente exigido, tener la disponibilidad de recursos es fundamental para evitar el impacto que pueda generar en otras atenciones responder a requerimientos que se suman para atender a la población que llega al país.

En el caso particular del VIH, es necesario indagar en las razones de este aumento -el que resulta preocupante-, y desde luego reforzar las campañas preventivas no solo en la población nacional, sino también en los extranjeros, a fin de familiarizarlos bien con los riesgos de esta enfermedad y sus vías de contagio. Si bien se trata de una enfermedad que puede ser bien manejada con medicamentos, sus tratamientos son costosos y de allí la necesidad de evitar su propagación.