Tiroteo al Capital Gazzette habría sido por venganza
Jarrod Ramos, de 38 años, cumplió con las amenazas que hizo por años contra el periódico después de que en 2011 publicaron un artículo sobre su acoso a una mujer.
“En aquel entonces, dije que (Jarrod) Ramos me parecía lo suficientemente loco como para llegar un día al diario y matarnos a tiros a todos”, recordó Thomas Marquardt, exeditor del diario The Capital Gazette de Maryland, un día después del ataque que sufrió el periódico estadounidense, que dejó a cuatro de sus periodistas y a una asistente de ventas muertos.
Nuevos antecedentes del caso revelaron ayer que el autor, identificado como Jarrod Warren Ramos, de 38 años, tenía un historial de resentimiento contra el medio, al que había amenazado anteriormente. Pero en esa oportunidad, Capital Gazette no quiso demandarlo por “temor” a empeorar la situación.
La prensa local señaló que en 2011 Ramos comenzó a acosar a una excompañera de clases a través de las redes sociales. Lo que inició con una solicitud de amistad, aumentó hasta que ella decidió denunciarlo a la policía.
Luego de que Ramos se declaró culpable de acoso, fue condenado a libertad condicional, debiendo asistir a terapia y con prohibición de acercarse a la víctima o a su familia. Pero una semana después del juicio -en su edición de domingo- el diario publicó un artículo titulado “Jarrod quiere ser tu amigo”. En aquel texto, se detallaba cómo Ramos persiguió a la mujer, le dijo que se suicidara y provocó que la despidieran de su trabajo, sin revelar la identidad de la víctima.
Un año después de la sentencia, Ramos presentó una denuncia por difamación contra el diario, contra Eric Hartley -el periodista que escribió el artículo- y contra Thomas Marquardt, entonces editor. Dos meses más tarde, la queja que en un inicio era de dos párrafos, se extendió a 22 páginas y a una demanda por invasión a la privacidad.
Pero la acción judicial fue desestimada en primera instancia y en la apelación. “No hay absolutamente ninguna evidencia o una afirmación de que la declaración (en el artículo) era falsa”, señaló en esa oportunidad el juez del caso, Maureen Lamasney.
Sin embargo, el veredicto no calmó la ira de Ramos, ciudadano estadounidense que estudió ingeniería informática y que había trabajado en la Oficina de Estadísticas Laborales, sin más antecedentes criminales.
Ramos creó entonces una cuenta de Twitter “para defenderse”. Al principio publicaba tuits contra el diario, pero las amenazas se fueron intensificando. En la descripción de usuario, escribió que estaba demandando a personas del Condado Anne Arundel y “haciendo cadáveres de carreras corruptas y de entidades corporativas”. La cuenta ahora está desactivada.
El tirador de Maryland fue encarcelado bajo cinco cargos de homicidio en primer grado y el juez ordenó su detención sin derecho a libertad bajo fianza, al ser considerado “un peligro para la sociedad”.
El jueves, Ramos bloqueó la salida del periódico para que nadie escapara y adquirió el arma hace más de un año. “Esta persona estaba preparada para disparar a la mayor cantidad de personas posible”, señaló el jefe de policía Timothy Altomare. Las fotos de las cinco víctimas fatales aparecieron en la portada de ayer del Capital Gazette. Rob Hiaasen (59), subeditor; Gerald Fischman (61), editor; Wendi Winters (65), periodista; John McNamara (56), periodista; y Rebecca Smith (34), asistente de ventas.b