Iglesia evalúa cambiar protocolo de denuncias de abusos
“Debiera ser inmediatamente la justicia civil la que tome estos casos”, dijo ayer Ricardo Ezzati.
El caso del excanciller Óscar Muñoz Toledo, quien quedó en prisión preventiva tras ser formalizado por abuso sexual y estupro, generó preocupación al interior de la Iglesia. Ayer, en medio de las celebraciones en honor a la Virgen del Carmen, autoridades eclesiásticas aseguraron que se está evaluando modificar los protocolos para abordar este tipo denuncias.
El arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, se refirió ayer al caso del excanciller tras una homilía realizada en el Templo Votivo de Maipú.
Según dijo la máxima autoridad de la Iglesia en Chile, solo conoció el caso de Muñoz luego de que este presentara una autodenuncia. Y sobre los protocolos vigentes, aseguró que “deben modificarse, y ojalá que a la Iglesia se nos libere de esto. Estoy totalmente de acuerdo que debiera ser inmediatamente la justicia civil la que tome estos casos y que los juzgue de acuerdo a la ley del país”, dijo Ezzati.
El administrador apostólico de Rancagua, Fernando Ramos, quien hasta hace poco se desempeñaba como obispo auxiliar de Santiago, también se refirió al tema y reconoció que se está “re-estudiando que quizás hay que hacer otros protocolos más precisos al respecto, para que los menores de edad y las personas más vulnerables siempre estén resguardadas ante cualquier posibilidad de abuso, de cualquier persona”, dijo a radio Cooperativa.
Uno de los temas que genera dudas es el conocimiento que tuvieron las autoridades de la Iglesia respecto del caso del excanciller Óscar Muñoz. Si bien su caso fue informado en enero de este año, en junio la fiscalía realizó diligencias tras abrir de oficio una investigación.
Consultado sobre por qué la Iglesia no denunció el caso a la justicia civil, Ezzati aseguró que “hay una legislación en Chile que permite que la Iglesia, que es una organización reconocida por el Estado, tenga la posibilidad de acoger a las personas y que ellos tengan la posibilidad de discernir a dónde quieren que se les haga justicia”. El cardenal añadió que cuando alguien presenta en la Iglesia ”una acusación que los toca personalmente, siempre se le dice: ‘usted tiene todo el derecho, y si quiere, el deber también de presentar su denuncia a la fiscalía’, y eso es lo que siempre hacemos”.
En la ceremonia en Maipú, laicos alzaron carteles con frases como “no más sacerdotes abusadores ni obispos encubridores”, y “no nos robarán la esperanza, otra Iglesia es posible”. Sobre la manifestación, Ezzati aseguró estar “totalmente de acuerdo, no hay problema en eso. Yo mismo les agradecí que ellos hubieran estado ahí”.