La Tercera

El Frente Amplio, el PC y las violacione­s a los derechos humanos

- Por Felipe Kast Senador Evópoli.

El 6 de septiembre de 2015 era un domingo cualquiera, en que las Damas de Blanco caminaban en La Habana llevando en silencio las fotos de sus familiares, sus nombres, y los años de injusta condena. Algunos carteles decían: “revolución=represión”. Como cada domingo, fueron reprimidas, golpeadas y detenidas por policías y fuerzas de choque comunistas. La única diferencia, al menos para mí, es que ese día pude acompañarl­as, ser detenido y golpeado junto a ellas. Desde ese momento, hace tres años, ellas siguen sufriendo el dolor de una dictadura implacable.

Hace pocos días, Yolanda Santa- na Aldana, una Dama de Blanco, fue condenada en juicio sumarísimo, sin defensa, a un año de prisión por no pagar la multas que se generaron por “desobedece­r decisiones de las autoridade­s”. El delito de Yolanda fue salir de su casa (sí, salir de su casa) rumbo a la homilía semanal y a la marcha pacífica que le sigue. Yolanda acumuló 12 multas por un total de 1.800 pesos cubanos, unos 47.000 pesos chilenos, que en Cuba implica el salario total de cinco o más meses (sí, un cubano promedio gana unos 10.000 pesos chilenos al mes). Su hija reporta que Yolanda fue internada en una celda de castigo, el hacinamien­to carcelario no le permite una celda común. (Cuba ocupa el 6º lugar mundial con 510 presos por 100.000 habitantes, Chile el 55º con 233).

Una semana después de la detención de Yolanda sesionó en La Habana el Foro de Sao Paulo. Conspicuos militantes del Partido Comunista y el Frente Amplio chileno se hicieron presente. Como es ya costumbre, la complicida­d con las violacione­s a los derechos humanos de los gobiernos de izquierda impide cualquier muestra mínima de compromiso con las libertades civiles a estos seudodemóc­ratas. Toda una mañana del foro se dedicó a recordar el pensamient­o de Fidel y a despotrica­r contra “la derecha imperial”, con intervenci­ones de los presidente­s Maduro (Venezuela), Morales (Bolivia), Sánchez (El Salvador), y Díaz-Canel (Cuba), y también de Dilma Rousseff, la depuesta presidenta de Brasil.

No pudo asistir el anfitrión del encuentro anterior —Daniel Ortega—, muy ocupado en reprimir mortalment­e a estudiante­s, y responsabl­e de 351 muertes y 261 desapareci­dos (hasta el 11 de julio) en las recientes protestas en Nicaragua. Aun así, sus cómplices del foro le rindieron tributo y le entregaron cerrado apoyo, declararon justificad­as dichas muertes en “legítima defensa” del comandante Sandinista y, de paso, redujeron a la Comisión Interameri­cana de Derechos Humanos a un instrument­o de “los designios del imperialis­mo”, mismo que a la OEA y que cualquiera que le exija a la izquierda el respeto de los derechos humanos. En este último grupo cae nuestro país y otras 13 naciones que esta semana suscribier­on una declaració­n rechazando “los graves hechos de violencia” en Nicaragua.

Es una vergüenza para Chile y para con nuestra historia que exista selectivid­ad a la hora de condenar dictaduras y violacione­s a los derechos humanos. Del PC ya no sorprende, pero habría esperado más del Frente Amplio.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile