IMPUESTOS AL AZÚCAR Y A LOS ALCOHOLES
SEÑOR DIRECTOR
En entrevista publicada en Pulso el 6 de agosto, Claudio Agostini realiza afirmaciones que es necesario aclarar.
Los datos que entregó Patricio Jottar, gerente general de CCU SA, en una carta anterior publicada por este mismo diario (11 de julio) son reales y objetivos. Primero, las cifras oficiales de consumo per cápita de alcohol en Chile que entregan la OMS y la OCDE muestran empíricamente que el consumo se ha mantenido estable a lo largo de la última década. Segundo, es una realidad que el aumento del impuesto se ha transferido íntegramente al precio de los productos; y tercero, también es una realidad que cerca del 87% del consumo de cervezas, vinos y licores corresponde a los grupos socioeconómicos C2, C3, D y E. Los tres puntos anteriores son datos. A partir de ellos, nuestra carta concluye que el alza de impuestos de alcoholes de la reforma tributaria de 2014 no fue correctiva sino que fue regresiva.
Adicionalmente, Francisco Diharasarri, gerente general de CCU Chile, en una entrevista a este mismo medio (15 de julio), entregó otro dato cual es que el consumo de gaseosas sin azúcar ha crecido sostenidamente desde 2003. A partir de lo anterior concluye que este cambio hacia las alternativas menos azucaradas no es en función del alza de impuestos de la reforma tri- butaria de 2014, sino de los hábitos del consumidor.
Estos son los antecedentes. Los datos que hemos entregado son indesmentibles. Las conclusiones que se pueden obtener a partir de estos datos dependen –naturalmente- de quién haga la interpretación. A nuestro juicio, es muy claro que estos impuestos implementados en la reforma tributaria de 2014, son regresivos y no ayudan a corregir conductas.
Por último, el Sr. Agostini refiere a los intereses corporativos de CCU detrás de sus declaraciones. No es buena práctica descalificar una opinión solo por quien la hace sin analizar adecuadamente su contenido. A CCU, como parte de crecer rentable y sustentablemente, le preocupa que se use un mal argumento para intentar validar las alzas de impuestos de la reforma tributaria 2014, particularmente cuando estas son discriminatorias, regresivas y actúan en perjuicio de los consumidores, la mayoría de los cuales consumen estos productos de manera responsable.
Marisol Bravo L.
Gerente Asuntos Corporativos y Sustentabilidad de CCU