COMPARTAMOS LA CIUDAD
SEÑOR DIRECTOR
El debate sobre la integración social en nuestras ciudades está más presente que nunca en la agenda. La idea de levantar un edificio para familias con menos recursos en la comuna de Las Condes ha sido un paso importante en esta nueva conversación acerca de cómo construir una ciudad distinta. Hoy, en mi querida capital, desgraciadamente tenemos diferentes Santiago.
Hay comunas para ricos y otras para po- bres. Comunas con la calidad de vida de países de la OCDE y otras con una realidad totalmente opuesta y fracturada.
Santiago fue diseñada en dictadura para la segregación y la desconfianza. Para que no podamos compartir las plazas, los parques ni los colegios. Para que no nos encontremos con el otro. Esta realidad debemos cambiarla. Necesitamos permitir el encuentro y la integración en las ciudades del país.
No podemos seguir aceptando que haya comunas que carecen de servicios básicos que en otras son tan normales. Por suerte, hay iniciativas que buscan cambiar el paradigma de la segregación urbana, para dar el paso hacia construir ciudades integradas que permitan elevar el estándar de vida de todos.
Desde la Fundación TECHO-Chile han propuesto recientemente la Ley de barrios 20/60, que busca que cada barrio de las ciudades del país tenga entre 20% y 60% de población vulnerable. Como un enamorado de Santiago, me gustaría que pudiéramos hacer realidad esta propuesta, pues apunta a generar más integración social en cada rincón de nuestras ciudades. Es momento de dar un paso más allá y compartir la adicción que todos debiéramos tener por una ciudad sin límites.
Rodrigo Guendelman