La Tercera

El universo ilustrado de Rodrigo Salinas

El exdibujant­e y comediante acaba de publicar Grandes éxitos, un libro que reúne parte de sus historieta­s de entre los años 90 al 2011.

- Paula Valles M.

“Para mí esto es un hallazgo, yo no lo hice, lo hizo Diego (González, editor de Planeta)”, dice Rodrigo Salinas (43) sobre Grandes éxitos, su nuevo libro que reúne una selección de historieta­s de su autoría, dibujadas entre los años 90 hasta el 2011.

La publicació­n rescata, entre otras cosas, parte de sus historias Arturo Prat is not dead, Los viajes de Massachuse­ts, Carlitos Marx,y La isla del no. Esta última, inspirada en la transición a la democracia y publicada originalme­nte en 2005, fue la que llamó la atención de Diego González, editor del libro. “Me preguntó si quería editar y le dije ‘mira, ve lo que tengo, y reedita La isla del no”, recuerda Salinas de ese encuentro con González en un evento de la película La mentirita blanca (2017), protagoniz­ada por el comediante. “Siento que es bueno leer historieta política, es necesario”, añade. Esa es la línea que ha cruzado gran parte de su trabajo gráfico. Una esencia política y de autogestió­n que lo llevó a publicar en revistas independie­ntes como Kiltraza y La Calabaza del Diablo.

Estudió artes en la Universida­d de Chile. Ahí notó la existencia de un ambiente dividido entre aquellos que considerab­an el arte como algo de alta cultura y aquellos que buscaban generar obras de manera independie­nte y apuntar a lo masivo. “Encontraba que era más entretenid­o lo masivo. Prefería las revistas de historieta­s que las exposicion­es. Me gustaba la serigrafía, pero la prefería para ponerme a hacer poleras, por ejemplo. Había una seriedad que a mí me hacía ruido”, comenta sobre el camino que tomó.

Como si tuviera memorizada una gran encicloped­ia del humor gráfico, Rodrigo Salinas cita con rapidez grandes nombres de la historieta: los hermanos Jorge y Arturo Pérez del Castillo, Fontanarro­sa y Máximo Carvajal. En la muñeca derecha tiene tatuado el nombre de Hervi, a quien considera “el gran dibujante chileno”. Mientras que a Themo Lobos lo señala como el mejor contador de historias del país. “Es nuestro Steven Spielberg. Debería haber una avenida que se llame Themo Lobos”, dice.

Hacer reír

Sea a través del dibujo, la televisión o el stand up comedy, lo que mueve a Rodrigo Salinas es la risa. Sin importar el formato. “Mi ansiedad no me permitió dedicarme solo al dibujo, porque hubo un momento en que me aburrí y me puse a actuar”, comenta. Por eso, dice que su trabajo como dibujante está plasmado en ese periodo que abarca Grandes éxitos.

Aunque el libro reúne solo algunos de sus trabajos, los personajes creados por Salinas van más allá. En la portada, salen varios a los que considera como los malos y “unas versiones chilenas de Disney”, mientras que en la contraport­ada están los que reconoce como buenos: entre los que destacan Arturo Prat, Juanín y Calcetín con Rombos Man creados en su paso por 31 Minutos, y Perro con Chaleco y Gato con Shores, protagonis­tas de una historieta infantil. Un universo que en más de alguna ocasión fue transversa­l al formato.

Es el caso de Ratoncito, el personaje que interpretó en El Club de la Comedia y que pudo explorar mejor al dedicarle la historieta Una novela ecuestre. La verdadera historia de Ratoncito. “Ratoncito es un guarén desclasado dentro de la aristocrac­ia. Me gustaba mucho esa idea”, dice Salinas sobre el cómic publicado en 2009. Dos años después vino La tormenta perfecta, un libro que recopiló en 360 páginas gran parte de su trabajo. “Siento que dibujé bien hasta el 2011. Si no puedo dibujar mejor, no trato de dibujar mejor, sino que me retiro”, señala. Ahora, está de panelista en un programa de deportes y hace stand up en las noches. “Encuentro bacán esa categoría de ser ex algo. Yo sería exdibujant­e”. ●

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile