PENSIONES SOLIDARIAS
SEÑOR DIRECTOR Desde el 2016 la ciudadanía ha demandado el cambio del sistema previsional. Se trata de una posición justa y sensata. El sistema vigente es caro, ineficiente y poco solidario. Exige a cada persona autofinanciar su pensión y entrega la administración de ese dinero a los privados.
Así, mientras otros se enriquecen, las pensiones se desvalorizan y, llegado el momento, los chilenos deben enfrentar su jubilación empobrecidos.
El actual sistema de pensiones está deslegitimado y refleja las profundas desigualdades de la sociedad. No es más que otro ejemplo de la incapacidad del mercado para dar respuesta a las necesidades elementales de la sociedad de manera justa y solidaria. Y a pesar de que en los gobiernos de la Presidenta Bachelet se concretaron algunos avances, la demanda sigue pendiente.
Nuestra responsabilidad, ahora desde la oposición, es contribuir con propues- tas serias para resolver la difícil situación que vive la gran mayoría de los adultos mayores y ofrecer un mejor escenario para quienes jubilen en el futuro.
Por ello, ponemos a disposición del resto de los partidos, el movimiento social, la academia y también el gobierno, las propuestas de est a bancada contenidas en el libro “Un Nuevo Sistema de Pensiones para Chile”.
No pretendemos que esta propuesta sea la última palabra, pero sí aspiramos a que sea el inicio de un diálogo amplio, con posiciones claras y definidas.
Lo que nadie puede soslayar es que urge, desde ya, mejorar las pensiones y cambiar las bases sobre las cuales se cimenta el sistema si no queremos enfrentar una crisis todavía mayor en el futuro.
Rabindranath Quinteros
Jefe de Bancada de Senadores Socialistas