MODERNIZACIÓN DEL SISTEMA TRIBUTARIO

SEÑOR DIRECTOR

En declaraciones recientes, el diputado RD, Giorgio Jackson, presentó una serie de argumentos para sostener su rechazo a la idea de modernizar nuestro sistema tributario.

Al escucharlo, queda de manifiesto que el diputado se contradice y presenta una serie de puntos para tratar de presentar como técnica, una oposición meramente ideológica.

La izquierda había anunciado que no iba a apoyar una reforma que disminuyera la recaudación fiscal. Sin embargo, el proyecto del gobierno no solo la mantiene, sino que incrementa desde el primer día.

Sin este último punto, dicen que caerá la recaudación de los ricos y aumentará la de los pobres, y que se viola el principio de justicia tributaria.

Tomemos, entonces, la justicia como argumento. Primeramente, lo que el proyecto propone es, básicamente, que sin modificar ni la base ni la tasa de un impuesto, en este caso el IVA, todos cumplan con su obligación tributaria. Nada más justo que eso. Adicionalmente, se busca volver a otro principio de justicia esencial: que quienes ganen lo mismo, paguen los mismos impuestos y el sistema no discrimine a si mi fuente de ingreso es por trabajo (como empleado) o capital (como emprendedor).

Hoy el sistema castiga a éste y –por más que moleste a la izquierda- no es algo que afecte únicamente a “los ricos”. En la declaración renta 2018, más de 150.000 empresas de menor tamaño sufrieron esta discriminación, que el proyecto del gobierno elimina. Finalmente, el diputado Jackson argumenta en contra de los impuestos a los servicios digitales, cosa que no hace más que nivelar la cancha entre los proveedores de servicios tradicionales y quienes lo hacen vía nuevas tecnologías, junto con resguardar la erosión de la base tributaria.

Nuevamente, ¿es justo que todos quienes están otorgando un mismo servicio tengan el mismo tratamiento? Sí, es justo. Además, un impuesto que se recolecta a través de tarjetas de crédito en este tipo de servicios, difícilmente resulta regresivo (es cosa de ver las tasas de bancarización).

Tal vez es que simplemente, al diputado no le gustan los impuestos, lo que sería toda una novedad en la izquierda.

Solo queda esperar que, a la luz de la evidencia, se produzca un debate legislativo serio y honesto, sin intentar confundir presentando realidades falsas a la ciudadanía.

Pablo Correa

Director Ejecutivo de Horizontal