JUEGO ILEGAL EN CHILE
SEÑOR DIRECTOR
La opinión pública es testigo del accionar mostrado esta semana por el Ministerio Público y la PDI, en la investigación sobre el desembozado juego ilegal en Chile.
Por otra parte, con preocupación miramos la propuesta sobre el juego ilegal que ha surgido desde la comisión de Regionalización e Interior del Senado, pues ella legitima lo que hoy es ilegal, y transforma el problema de la persecución penal en un problema de la fiscalización, y, finalmente, en una judicialización desmedida para el futuro. Hay diferentes experiencias internacionales en Europa y Norteamérica que así demuestran.
Proponemos que todo privado que quiera colocar máquinas de juegos de azar en sus locales, de cualquier tipo que estos sean, las adquieran en las oficinas de Polla Chilena de Beneficencia, quien financiaría la adquisición de estas máquinas, las instalaría y, centralmente controlaría la recaudación de la misma, sus juegos, los horarios, el tenor de las temáticas y las formas de pago, conforme a los instructivos emitidos para estos efectos por la Superintendencia de Casinos de Juegos (SCJ), recaudando la venta y repartiendo lo que corresponda para beneficio fiscal, municipal o de instituciones de beneficencia, conforme lo determine la ley, que para estos efectos se defina.
Esto es lo que Polla Chilena de Beneficencia ha realizado desde 1934, junto a la Lotería de Concepción, cuando reemplazamos a las innumerables loterías ilegales, existentes en el país en esa época. Esta misión encomendada por el legislador de esos años, bien la podemos llevar a cabo hoy, en lo que se refiere a este nuevo tipo de juego ilegal.
Polla Chilena de Beneficencia financió el primer estudio de ludopatía realizado en Chile, el que arrojó una tasa de juego problemático de un 2,9% de la población, lo que nos ubica por arriba de la tasa promedio de los países donde se realiza esta medición y permitió visibilizar un problema que afecta principalmente a jóvenes y dueñas de casa de los grupos socioeconómicos más postergados.
Vemos una oportunidad de hacer algo por ellos y ponemos nuestras capacidades institucionales a disposición.
Fernando Massú
Presidente del Directorio Polla Chilena de Beneficencia