Procedencia cuestionada
Jeremy Wood Profesor de la Universidad de Nottingham
Según apuntó Martin Kemp en Christ to Coke (2012), se sabía que Da Vinci diseñó un Salvator mundi y había una serie de copias de su composición. Se supone que fue realizada para la pareja real francesa, hacia 1.500, pero no volvió a aparecer hasta el siglo XVII en Inglaterra, en posesión del rey Carlos I. Se pensaba que llegó allí a través de su esposa, la princesa francesa Enriqueta Maria, y que la obra se quedó con ellos hasta la ejecución del rey, en 1649. Se desconoció su paradero durante los siglos XVIII y XIX, hasta que reapareció en el XX.
Pero una investigación de Jeremy Wood, especialista en el siglo XVII, cuestiona la proveniencia del cuadro, que no se habría encontrado en la propiedad de Carlos I, sino en la residencia del Duque de Hamilton.
¿Es posible determinar si el cuadro de Hamilton es el que está en Abu Dabi?
Hay una gran probabilidad de que ese sea el caso. El problema ahora es si el Salvator mundi de Hamilton fue entregado o intercambiado con el rey después de 1640, o si el rey poseía otra versión y el de Hamilton fue exportado a los Países Bajos en 1649.
¿Qué implicancias podría tener su investigación sobre esa procedencia?
La procedencia propuesta ha sido cuestionada. Para ser justos, las primeras sugerencias hechas por Christie’s usaban las palabras “posiblemente” y “probablemente”. El problema ahora es si la pintura de Hamilton pasó a Carlos I durante la década de 1640 o no.
¿Permite eso alguna precisión en cuanto a la atribución del trabajo?
En este caso, la cuestión de la propiedad está separada de la atribución, a menos que la historia de la obra propiedad de Hamilton se pueda remontar directamente hasta Leonardo, lo que es poco probable.
¿Es un problema que haya variantes de la imagen por alumnos y seguidores de Da Vinci?
Incluso hubo al menos un par de esas variantes en Inglaterra en el siglo XVII. Los coleccionistas de élite de la época querían las mejores obras de los mejores maestros, y una atribución a “Leonardo” podría considerar obras de sus seguidores y alumnos. Entonces, el rey podría tener un ‘Leonardo’ que ahora no diríamos que era del propio Leonardo, y Hamilton podría, casi por accidente, tener uno que sí lo fuera.b