LA CONSAGRACIÓN DE LA MEMORIA
Vindicación de la primavera fue un grito de libertad del bailarín y coreógrafo Patricio Bunster (19242006) en plena dictadura. A través de los cuerpos torturados de las víctimas expresó con coraje y claridad su absoluto rechazo a las violaciones de los derechos humanos. La pieza, impresionante y arriesgada para esos años oscuros, es un ejemplo de la danza como un arte de resistencia y resiliencia. Bunster estaba convencido que la danza lo ayudó a ver el dolor desde una visión optimista y esa perspectiva de esperanza es lo que transmite hasta hoy Vindicación que volvió en Matucana 100.
Esta es una versión del ballet de 1913 La consagración de la primavera, de Nijinsky con música de Igor Stravinsky. Luego de un primer intento de 1964 en clave lati- noamericanista (Uka Ara), Bunster estrenó en 1987 en el Teatro Baquedano esta alegoría del ciclo vida y muerte propio de la naturaleza como una “vindicación” del original, es decir, una nueva creación con una lectura política donde el concepto de libertad reemplaza al de primavera. Así la libertad es flagelada, martirizada y violada por criminales de estética militar, la muerte es un soldado que desata el exterminio de todo lo que lo rodea y la escena de los cuerpos bajo las raíces alude a la infructuosa búsqueda de restos de los desaparecidos por parte de sus familiares.
Bunster fue una de las figuras históricas del Ballet Nacional Chileno y fundador del Centro Espiral junto a Joan Turner en 1985. Al ver Vindicación, donde la libertad vence a la muerte, no se puede dejar de recordar la historia que unió a Joan y su hija Manuela Bunster, ahora
a cargo de la dirección general de la pieza, con Víctor Jara. El músico no aparece en escena, pero sirve de inspiración a los 28 bailarines de la compañía Espiral que componen el nuevo elenco.
La de Joan y Víctor fue una historia de amor truncada, pero el mensaje del cantautor se convirtió en un referente para las nuevas generaciones. En julio se condenó a nueve militares en retiro por su asesinato, ocurrido el 16 de septiembre de 1973. La primavera y la justicia llegaron para él 45 años después.
El reestreno de Vindicación se suma a los esfuerzos del mundo cultural por recordar que las violaciones a los derechos humanos son inaceptables y que el respeto por la memoria y el dolor de las víctimas es un valor intrínseco de la democracia (ju. a do. 20 h, $ 6.000 y $ 4.000, hasta el do. 30).