Las redes de J.A. Kast en el Congreso
Pese a que no presentó una lista parlamentaria, el excandidato presidencial ha mantenido una coordinación permanente con distintos legisladores de RN y la UDI, acciones que por estos días se tradujeron en una presentación al TC por identidad de género.
Somos la voz de esa mayoría silenciosa, que muchas veces es acallada por grupos ideológicos”. La frase es parte de la descripción con que Acción Republicana (AR), el movimiento fundado por el excandidato presidencial José Antonio Kast, se define en su página web.
Esa voz que dicen representar tiene también una expresión en el trabajo legislativo. ¿Cómo? Aunque AR no cuenta con representación parlamentaria formal pues no compitió en las elecciones con una lista propia-, sus ideas y propuestas forman parte de las discusiones en el Congreso a través de la coordinación permanente que dirigentes del movimiento y su líder mantienen con distintos parlamentarios, en particular pertenecientes al expartido de Kast, la UDI y los sectores más conservadores de RN, entre ellos la denominada “bancada cristiana”.
La relación se fue dando de manera natural, reconoce Kast, y surgió a través de los vínculos que él mismo generó durante sus 16 años como diputado y, luego, en sus recorridos por el país buscando apoyos para su aspiración presidencial, donde conoció a diversos candidatos que hoy ocupan un escaño en el Parlamento.
A partir de ello, desde marzo de este año, las llamadas “minutas republicanas” se fueron convirtiendo en insumos periódicos para un número creciente de diputados y adherentes. Se trata de documentos con argumentos, explicaciones y sugerencias bibliográficas para abordar materias tan diversas como las tomas feministas, la ley de identidad de género, la permanencia de Chile en el Pacto de Bogotá y la objeción de conciencia en materia de aborto, entre otras.
Junto a esos textos, AR comenzó a ofrecer apoyo a los legisladores para enfrentar debates públicos y procesos legislativos, insumos para la preparación de enmiendas a los proyectos de ley e ideas para enfrentar el trabajo en el Congreso, sin ofrecer “asesoría legislativa” propiamente tal.
“Nosotros no andamos contando votos a favor o en contra de los proyectos, sino que les entregamos argumentos a los parlamentarios de por qué algo es malo o bueno”, explica Kast, y detalla que el objetivo es poder influir en el proceso de toma de decisiones y en la opinión pública.
En palabras del diputado RN Miguel Mellado, “la colaboración que hemos tenido ha sido espectacular para desarrollar mi trabajo parlamentario. Este vínculo se da a partir de una coincidencia de valores y también de miradas en el tema de seguridad en La Araucanía, por ejemplo”. En este sentido, dice esperar que “sigamos trabajando en conjunto, porque se ha dado una excelente relación con él, con su señora y con su círculo cercano”.
Además de Mellado, el movimiento mantiene una estrecha relación con los diputados RN Cristóbal Urruticoechea, Camila Flores, Harry Jürgensen, Eduardo Durán, Leonidas Romero, Diego Paulsen, Francesca Muñoz y Pablo Prieto, y con los UDI Sergio Bobadilla, Ignacio Urrutia, Iván Norambuena y Juan Antonio Coloma, entre otros.
Fue así como en la tramitación del proyecto de identidad de género se coordinó una férrea oposición a la ley, cuyo trabajo cotidiano fue liderado por un organismo surgido al alero de AR, “Cuide Chile”, fundación que dirige la señora del expresidenciable, la abogada María Pía Adriasola.
Y aunque su esfuerzo por evitar la aprobación de la iniciativa no se concretó, 38 diputados finalmente ingresaron al Tribunal Constitucional (TC) un “téngase presente”, texto en el que dan cuenta al organismo de sus reparos al proyecto. Y ahí, nuevamente, tuvo un rol central, pues quien redactó la presentación es el abogado Jorge Barrera, miembro de la comisión política de AR.