RECORTE PRESUPUESTARIO EN CULTURA
SEÑOR DIRECTOR
En relación con las argumentaciones dadas para justificar la rebaja presupuestaria de un 30% que se ha efectuado a seis importantes organizaciones culturales y patrimoniales del país, éstas resultan francamente incomprensibles.
La cirugía se hizo con el Museo Precolombino, el Museo Violeta Parra, el Teatro Regional del Biobío, Matucana 100, Balmaceda 1215 y el Teatro a Mil, y se sustenta en que estas entidades están en una misma glosa presupuestaria.
Lo anterior puede parecer justo, pues abre un espacio de concursabilidad, o incrementaría los recursos para patrimo-
nio. Pero se omite que hay muchas otras instituciones beneficiarias, de igual situación, que no han visto variar sus presupuestos o incluso los han aumentado.
Entre estas otras están el Museo de la Memoria, el GAM, el Parque Cultural Valparaíso, Villa Grimaldi, Londres 38, el Teatro Municipal de Santiago, la Fundación Frei, la Fundación Patricio Aylwin, la Corporación Estadio Nacional Memoria Nacional y la Fundación Documento y Archivo Vicaría de la Solidaridad.
¿Qué justifica que a unas se les reduzca ese porcentaje y a otras no? ¿Existen instituciones de primera y segunda clase? ¿Si es necesario hacer un ajuste, no sería lógico uno más equilibrado y general? ¿Es más fácil golpear a estas instituciones más pequeñas que a las que realmente reciben enormes recursos?
Esto es como si en una casa los padres, enfrentados a dificultades económicas, en el desayuno a unos hijos les dan pan y a otros se los niegan.
No parece ni sensato ni justo, y además afecta algo que todos valoramos, acceder cada vez a más y mejores bienes culturales. Es de esperar que en el debate parlamentario, esta situación se enmiende y el gobierno se dé cuenta.
Óscar Acuña Poblete Abogado