Hay muro después de cuatro meses
Treinta metros de la muralla que rodea a Juan Pinto Durán se cayeron por el viento, hoy están casi reconstruidos. La Municipalidad de Macul exigió a la ANFP una pared más resistente y restringió el uso de mallas para los días de prácticas.
El complejo Juan Pinto Durán sucumbió ante el último temporal que azotó Santiago. La imagen era curiosa y a la vez preocupante: el muro que daba hacia Avenida Macul se derrumbó producto de las fuertes ráfagas de viento que afectaron a la capital el 28 de mayo pasado.
Parecía ser un problema simple. Sin embargo, en septiembre, el técnico Reinaldo Rueda dejó entrever que el asunto era más complejo de lo que se creía. Resulta que los 30 metros de la estructura seguían en el suelo; es más, dicho inconveniente era una de las razones que le impedía realizar los habituales microciclos con la selección chilena. Al colombiano no le preocupó buscar otro sitio para seguir con sus entrenamientos.
“La Municipalidad no ha autorizado que construyamos el muro que se cayó. Tampoco del punto de vista logístico, voy a exponer. No puedo volver a hacer un microciclo si no levantamos ese muro. Por seguridad, por privacidad y por todo. Sino todos los niños, todos los jóvenes de Macul, y toda la gente, y no vamos a poder trabajar y se van a perder 20 balones por entrenamiento. No nos dan permiso para volverlo a construir... se construyó hace 60 años... ahora no se puede volver a levantar”, se quejó el colombiano.
Efectivamente, la Roja adulta no volvió a concentrar en el recinto ubicado en la comuna de Macul desde ese incidente, pero sí lo hará desde el próximo lunes, cuando inicie su preparación para los amistosos ante Costa Rica y Honduras, en Rancagua y Temuco, respectivamente.
¿Cuál es la situación actual del muro de Pinto Durán?
Si bien aún no está totalmente reconstruida, la pared del búnker de la Selección está casi lista. Solo le restan detalles que tienen que ver con el estucado, aseguran desde la ANFP (ver fotos). En Quilín agregan que luego de varias reuniones con el Departamento de Obras de la Municipalidad de Macul, ambas partes llegaron a un acuerdo para el levantamiento de una tapia más resistente.
Eso sí, no fue fácil. Como la normativa comunal establece que en ese sector no se pueden superar los 2,2 metros de altura, se suscitaba un problema, ya que, según señalan desde el municipio, “si un balón cae hacia la calle podría provocar hasta un accidente de tránsito. Por otro lado, esas mallas que utilizaban no estaban en armonía con el entorno”.
Desde el municipio indican que hubo un buen entendimiento por parte de la federación. “Les pedimos que esas mallas no se utilizaran todo el tiempo, sino solo cuando hubiesen entrenamientos. También que el muro fuese de mejores condiciones, porque no se puede volver a caer. Eso es peligroso”, cierran en Macul. ●