ACREDITACIÓN EN EDUCACIÓN SUPERIOR
SEÑOR DIRECTOR
En una carta publicada el domingo en La Tercera, el rector de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Christian Schmitz, planteó la conveniencia de realizar reformas a medidas acordadas hace poco menos de 10 meses (en la Ley 21.091), por ejemplo, respecto a la existencia de agencias privadas en la acreditación de carreras. Es llamativo que establezca el foco en estos aspectos, cuando el énfasis debiera ser pedir celeridad a las autoridades respecto a la implementación de la ley, particularmente en el nombramiento de la nueva CNA.
Así también llama la atención el desconocimiento de los procesos transitorios establecidos en la ley. Si una institución comenzó su proceso de acreditación (la autoevaluación es parte del proceso) se enfrentará a los criterios y estándares vigentes. “Aquellas instituciones cuyas acreditaciones institucionales vencieren durante los años 2018 y 2019 podrán iniciar sus procedimientos de acreditación de conformidad con la normativa vigente”, plantea la ley.
La falta de celeridad en su implementación hace que inevitablemente se propongan ajustes a los plazos. Sin embargo, ello nos lleva a postergar ajustes urgentes al sistema de aseguramiento de calidad.
Aún estamos a tiempo para dar cumplimiento a estos plazos y no ver leyes misceláneas como herramientas para tapar la lentitud en la ejecución de la política.
Roberto Flores Exasesor del Mineduc