PREVENCIÓN DE DROGAS Y ALCOHOL EN LA EMPRESA
SEÑOR DIRECTOR
A fines de septiembre, el Cuerpo de Bomberos Metropolitano Sur comenzó la implementación de una política de prevención de drogas y alcohol en sus funcionarios. La iniciativa, aplaudida por las autoridades relacionadas con el tema, cuenta con una alianza con el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda) de la Región Metropolitana.
Considerando que el cuerpo de bomberos son organizaciones sin fi- nes de lucro y orientadas al servicio a la comunidad, cabe preguntarse respecto a las medidas de prevención de drogas y alcohol en otras faenas de trabajo que implican riesgo operativo, tales como construcción, el transporte, la minería, manufactura, entre otras.
En Chile, alrededor del 4% de las empresas privadas cuentan con estas políticas o programas de prevención e inhibición de alcohol y drogas entre sus trabajadores. Cifra, por cierto, poco alentadora si se compara con índices de países desarrollados, como Estados Unidos, donde cerca de un 80% de las empresas privadas han implementado estas políticas o programas.
No contar con medidas de prevención significa una mayor tasa de accidentabilidad, disminución en la productividad, un alto nivel de ausentismo, rotación de personal, etc.
El desafío de las organizaciones y empresas chilenas es alcanzar estándares internacionales, y aunque nuestro país no se caracteriza por ser proactivo frente a las problemáticas y riesgos latentes, no debemos esperar a que un accidente de proporciones sacuda la opinión pública para que se genere la conciencia necesaria.
Patricio Labatut
Gerente General Global Partners