Duro de matar
Atención familia, tengo los resultados de la encuesta CEP y adivinen qué: alcancé un 48% de evaluación positiva y un 91% de conocimiento. O sea que tengo pinta de candidato, olor a candidato, alma y condiciones para ser el candidato. ¿Qué les parece?”.
El entusiasmo del alcalde apenas consiguió levantar las cabezas de sus contertulios. Acostumbrados a las campañas, la idea de enfrentar un nuevo proceso les parecía, en el fondo, una cuestión meramente rutinaria.
“Pero todos sabemos que lo suyo es una carrera política, en cambio a mí es la gente la que me detiene en la calle para pedirme que sea la candidata”, le respondió la alcaldesa.
Esta vez fue el edil el que se hizo el desentendido. Si es cuestión de confesar, yernos y nueras han revuelto el gallinero familiar más de alguna vez. Optó por salir jugando por su cuenta: “Yo sabía que mi idea de un edificio con inclusión social ubicado en el barrio más pirulo de la comuna iba a provocar impacto”, les dijo.
“En mi caso no requiero mostrarme inclusiva, porque yo lidero una comuna inclusiva y mi propia historia nos habla de una mujer aguerrida que ha logrado salir adelante y superar los prejuicios”, continuó la alcaldesa.
“Muy aguerrida serás tú, pero aquí hay un único gallito de pelea y ese soy yo. ¿Quién más ha sido candidato una y otra vez? ¿Quién más ha soportado que lo suban y lo bajen del voto con las elecciones casi encima? Soy el ave fénix de la UDI, el sobreviviente de los coroneles, el artífice de la nueva derecha. Yo estuve arriba del techo de la municipalidad, paraguas en mano, esperando que lloviera mientras el sol brillaba. Yo inventé las playas populares y hasta las canchas de ski populares. Armé a los guardias municipales con frasquitos de gas y llené la comuna con botones de pánico”.
La nuera guardó silencio. Ningún osito regalón ni el mejor de los “kiki challenge” podrían compararse con tamaña gesta. Al césar lo que es del césar. Tal capacidad de resilencia sólo es digna de un gallo de pelea, que lo dieron por muerto y resucitó cual Lázaro. Ríndanse los Kast, los Moreno y los Ossandón. La tercera será la vencida.