Economistas top se reúnen en La Moneda
Comité electoral especial ha buscado facilitar la participación, con casi 300 mesas en el país, en los comicios que se realizarán mañana.
Solo en la Antártica y Juan Fernández la UDI no cuenta con militantes. Para el resto de las comunas del país, la colectividad ha debido buscar la mejor fórmula para asegurar la participación de sus cerca de 45 mil afiliados en las elecciones internas que se realizarán mañana.
Luego de que el pasado 2 de diciembre el sistema informático provisto por la empresa EVoting para habilitar el voto electrónico fallara, obligando a suspender los comicios, en esta segunda oportunidad las elecciones serán “a la antigua”, con lápiz, papel y urna. Así, en apenas dos semanas un comité electoral especial ha abordado los distintos detalles que significa implementar el proceso, que incluye la habilitación de los 203 locales de votación y 297 mesas, la disposición de los padrones y los 44.459 sufragios foliados e impresos en una imprenta acreditada por el Servel. Esto, además de la presencia de observadores de ese organismo en las distintas comunas.
Se habilitará, además, un centro de cómputos en la sede de la UDI en Santiago, que funcionará como call center para responder a los requerimientos que haya durante el día y, a partir del cierre de las mesas, a las 18.00 horas, centralizará la información para poder agilizar la entrega de los resultados.
Sin embargo, solo cuando se haya escrutado el 90% de los votos se dará el primer cómputo, como una forma de evitar especulaciones.
“La entrega de resultados no es una simple comunicación. Se trata de un acto solemne en donde no solo se den a conocer los escrutinios, sino que se transmita un resultado fiable. El comité electoral especial ha resuelto que este acto se desarrolle teniendo, al menos, el 90% de los votos escrutados”, explicó el secretario general del partido, Issa Kort.
Según conocedores del proceso, aunque se ha intentado facilitar la máxima participación, por ejemplo, buscando locales de votación con acceso universal y ubicados en zonas reconocibles por los electores, la tarea ha tenido ciertos contratiempos por la necesidad de “juntar” comunas que cuentan con un menor número de militantes con aquellas “más grandes”. Un caso icónico será el de Isla de Pascua, en donde solo hay inscritas cinco personas en la UDI, lo que impidió la habilitación de una mesa, obligando a que esos militantes deban votar en Valparaíso.
“Hemos hecho los máximos esfuerzos por llevar adelante este proceso de la mejor forma, con transparencia y asegurando garantías a todos. Hacemos un llamado a ambas listas a liderar un proceso impecable y comprometido, para que ese mismo ánimo esté en todos los militantes que concurran el domingo a votar”, subrayó Kort.b