“El pinochetismo es parte del pasado, el principal activo de RN es conducir cambios de futuro”
Nicolás Monckeberg Ministro del Trabajo: El secretario de Estado aborda el tema que se ha instalado en su colectividad y afirma que “es un debate innecesario”. Además, destaca el manejo que ha tenido el Presidente Piñera para enfrentar la crisis que gene
APOYOS EN RN A J. A. KAST “Lo que legítimamente alguien pueda pensar respecto a la elección presidencial de tres años más, definitivamente, no es relevante hoy y no debe distraernos”.
PINOCHETISMO EN RN “Nos eligieron no para reescribir la historia, sino para cambiar el futuro. En vez de obsesionarnos con el pasado, nuestra verdadera obsesión debe estar con el futuro”.
BAJA EN LAS ENCUESTAS “Si a nosotros nos exigen más que a otro gobierno es porque la gente sabe la capacidad del Presidente Piñera y fue testigo de su exitoso primer gobierno”.
De manera imprevista tuvo que trasladarse el viernes a Coquimbo para sostener una reunión con dirigentes sindicales. Desde un hotel en esa ciudad, por vía telefónica, el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, concede esta entrevista, donde aborda el primer año legislativo del gobierno. De igual manera, se refiere a uno de los temas que se ha instalado con fuerza en su partido, RN: el pinochetismo. “Me parece que es un debate innecesario, no nos olvidemos que los chilenos nos eligieron para cambiar el futuro”, asegura. El secretario de Estado también destaca la capacidad del Presidente Piñera para enfrentar la crisis que generó la muerte de Camilo Catrillanca. “El sello de manejo de crisis que el Presidente Piñera ha transmitido marca una diferencia con lo que habíamos conocido antes”, dice.
Este mes termina el primer año legislativo de este gobierno. Autoridades han coincidido en que cerraron el 2018 con una de las peores crisis de este mandato, debido a la muerte de Camilo Catrillanca. ¿Qué evaluación hace?
Los buenos gobiernos son precisamente los que el país necesita en momentos de crisis, sobre todo cuando son provocadas por factores externos al gobierno en sí mismo. Y, sin duda, las circunstancias de la muerte de Catrillanca ha sido muy difícil, pero donde el gobierno ha demostrado con claridad un principio fundamental desde el primer día: que vamos a actuar desde el primer día hasta el último con el estricto apego a la verdad, en este caso y en todos los casos que nos toque enfrentar, por difícil que sea. Porque si hay algo que marca la diferencia de cómo este gobierno ha manejado el difícil caso de Catrillanca ha sido la transparencia, el coraje y el estricto apego a la verdad con que el Presidente ha manejado el caso, aun cuando ha significado tomar decisiones muy difíciles.
¿Qué lecciones se sacan?
La principal lección que cualquier gobierno debe sacar de este caso es que ocultando la verdad solo se agrava el problema. Es precisamente lo que hace la diferencia en la forma en que este gobierno ha enfrentado este caso, que ha sido con estricto apego a la verdad. El sello de manejo de crisis que el Presidente Piñera ha transmitido marca una diferencia con lo que habíamos conocido antes.
¿Se ha dificultado instalar en la agenda el programa del gobierno?
Yo evito hacer comparaciones con gobiernos pasados, pero respecto a lo que usted pregunta es inevitable hacerlo. He visto pocos gobiernos que en sus primeros meses hayan sido capaces de presentar e ingresar al Congreso las reformas estructurales más importantes a que se comprometieron durante la campaña.
Bachelet en el primer año ya tenía aprobada la reforma tributaria. ¿Creen que ustedes puedan sacar los proyectos emblemáticos, siendo que son minoría en el Congreso?
No tengo ninguna duda de que los proyectos se van aprobar y bien, sin errores. Lamentablemente, la reforma tributaria que se aprobó el primer año (de Bachelet) no debió haberse aprobado (…) Lo que más valoro de las reformas que ha presentado el Presidente Piñera es que muchas de ellas han surgido de mesas de trabajo, de acuerdos transversales, de diálogo entre el gobierno y oposición. Eso hace no solo que se haya trabajado de forma eficaz y rápida, sino que las reformas sean de buena calidad.
¿Ese es el gran contraste con el gobierno anterior?
Insisto. No me gusta compararme con el gobierno anterior.
Pero el Presidente siempre compara cifras económicas con el gobierno anterior. De hecho, es algo que el senador Ossandón cuestionó…
No se trata de comparar con el gobierno de la presidenta Bachelet, se trata de rendirle cuentas al país de cuánto hemos avanzando desde el momento que asumimos.
Pese a que en el gobierno han hecho un esfuerzo por destacar las mejoras económicas, en las encuestas se consolidó una tendencia a la baja en la aprobación del Presidente. ¿A qué cree que responde?
Las encuestas por supuesto que uno debe considerarlas, porque dan señales importantes; cosa muy distinta es gobernar para las encuestas, porque cuando se gobierna para las encuestas no se hace lo correcto (…) Si a nosotros nos exigen más que a otro gobierno es porque la gente sabe la capacidad del Presidente Piñera y fue testigo de su exitoso primer gobierno.
¿Cree que lograrán revertir esa tendencia?
Sí. No tengo duda que muchas de las reformas, al ser aprobadas, van a generar frutos que serán bien recibidos por la opinión pública. Finalmente, lo que importa son los resultados concretos.
¿Cómo evalúa el rol que ha jugado Chile Vamos para instalar el programa de gobierno?
Los partidos de Chile Vamos han sido leales colaboradores en la agenda legislativa. No conozco un proyecto donde parlamentarios de Chile Vamos en su conjunto no hayan sido protagonistas de diálogo con la oposición y de votar ordenadamente. Y eso es un sello que tenemos que mantener. No nos olvidemos que, en el gobierno anterior, donde eran mayoría en el Congreso, no tenían orden interno y se farrearon una mayoría.
¿Y cómo evalúa el rol que ha jugado RN en estos últimos meses?
RN ha sido un leal colaborador en sacar adelante la agenda legislativa, no solamente votando el último día, sino que participando en los debates y promoviendo acuerdos.
¿Qué piensa del debate que ha surgido en RN sobre el pinochetismo?
A mí no me gusta. Me parece que es un debate innecesario, no nos olvidemos que los chilenos nos eligieron para cambiar el futuro y no para reescribir el pasado. Creo, además, que el talento y el empuje que han demostrado los parlamentarios jóvenes y los liderazgos de nuestra coalición, no debemos distraerlos en ese tipo de discrepancias, sino que debemos concentrarnos todos en sacar adelante el ambicioso programa de gobierno que todos hemos suscrito.
Parlamentarios de RN han dicho que ministros del partido han transmitido preocupación de que se esté discutiendo este tema en vez de enfocarse en el programa de gobierno.
¿Es efectivo?
Para mí, la principal preocupación es que saquemos adelante la reforma al sistema de pensiones, porque es justo y es urgente hacerlo. Desde ese punto de vista, junto con los diputados de RN y la UDI de la Comisión de Trabajo nos hemos puesto como objetivo difundirla para que la gente la conozca y apoye.
¿Es un retroceso instalar el tema del pinochetismo?
No me parecen relevantes las diferencias en las visiones que existan en nuestro partido respecto del pasado. A nosotros nos eligieron no para reescribir la historia, sino para cambiar el futuro. En vez de obsesionarnos con el pasado, nuestra verdadera obsesión debe estar con el futuro, porque eso es lo que une.
¿Comparte la visión de que el pinochetismo es parte de la diversidad de Chile Vamos?
Yo considero que el pinochetismo es parte del pasado. Considero que el principal activo de RN es conducir cambios de futuro, que Chile necesita para ser un país sin pobreza.
¿Qué le parece que diputados de RN apoyen a José Antonio Kast?
Si hay algo inevitable en política, y hasta pintoresco, es la ansiedad por las elecciones, cualquiera sea el momento. Llevamos apenas diez meses de gobierno y todos los liderazgos de nuestro sector, incluidos los que fueron candidatos presidenciales o que aspiran a serlo en el futuro, deben enfocarse en empujar el programa de gobierno por lo que nos eligieron. Esa es la única campaña que hoy nos debe comprometer.
¿No le incomoda como militante de RN que parlamentarios lo apoyen?
Lo que legítimamente alguien pueda pensar respecto a la elección presidencial de tres años más, definitivamente no es relevante hoy y no debe distraernos.
¿Cuál es su meta para este año como ministro?
La gran meta para este año es consolidar el sello que le hemos querido dar al ministerio, que es que pase de ser considerado como un ministerio de los conflictos, al diálogo. Queremos que este año quede claramente reflejado en tres grandes acuerdos en el Parlamento que permitan aprobar y despachar este año la reforma a las pensiones, el derecho a sala cuna universal y la necesaria modernización laboral.
¿Ve disposición en la oposición?
Hay un sector importante de la oposición que ha actuado con espíritu republicano, que ha puesto por delante los intereses de Chile por sobre legitimas diferencias políticas. Y eso ha permitido que saquemos adelante proyectos de ley. También ha quedado claro que hay un sector de la oposición que definitivamente se unen solo para destruir y criticar. Estos últimos no han entendido que ser oposición no significa oponerse a todo.
La reforma laboral la ingresará este mes. ¿Es efectivo que se volverá a regular los grupos negociadores en la reforma laboral y que se considerará negociaciones colectivas no regladas, sin derecho a huelga y fuero?
En el proyecto de modernización laboral vamos a proponer las reglas en que los grupos negociadores podrán negociar colectivamente. Y, obviamente, no serán las mismas reglas que los sindicatos, nosotros entendemos que ellos tienen ciertas prerrogativas que no tienen los grupos.
¿Y cuáles son esas reglas?
Prefiero no anticiparlas.
En la CUT rechazan volver a regular los grupos negociadores…
La CUT sabe que en esta materia la Corte Suprema, el TC y el propio Código del Trabajo obligan y garantizan el derecho a negociar de todos los trabajadores a través de sindicatos, preferentemente, y también a través de grupos negociadores. Cualquiera sea la opinión que uno tenga, debe entender que en un Estado de derecho estas instituciones deben respetarse.
METAS PARA EL 2019 “Queremos que este año quede claramente reflejado en tres grandes acuerdos (...) la reforma a las pensiones, el derecho a sala cuna universal y la necesaria modernización laboral”.
CRISIS POR CATRILLANCA “Si hay algo que marca la diferencia de cómo este gobierno ha manejado el difícil caso de Catrillanca ha sido la transparencia, el coraje y el estricto apego a la verdad”.
LA REFORMA LABORAL “En el proyecto de modernización laboral vamos a proponer las reglas en que los grupos negociadores podrán negociar colectivamente”.