Canadá quiere recibir 350 mil inmigrantes en 2019
La idea del gobierno es sumar hasta 1 millón de inmigrantes de aquí al año 2021. Plan se contrapone a política de EE.UU.
Mientras Estados Unidos y varios países de Europa han puesto límite y restricciones a la inmigración, Canadá parece ir en el sentido contrario. El gobierno del primer ministro Justin Trudeau dio a conocer un plan para recibir a un millón de inmigrantes durante los próximos tres años.
El proyecto busca contrarrestar el envejecimiento y el descenso de la tasa de natalidad de los canadienses, a la vez que ayudaría a aumentar la fuerza laboral del país. Esta iniciativa, ampliamente respaldada por el ministro de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía, Ahmed Hussen, busca incrementar exponencialmente el ingreso de inmigrantes. Así, para este año se espera recibir a 350.000, en 2020 a 360.000 y, en 2021 se concederá la residencia a 370.000.
“Gracias en gran parte a los recién llegados que hemos acogido a lo largo de nuestra historia, Canadá se ha convertido en el país fuerte y vibrante que todos disfrutamos”, comentó el ministro Hussen, quien a su vez es un inmigrante somalí que lleva años en Canadá. Con este proyecto aumentará de manera considerable el número de los 286.000 migrantes que durante el año pasado se convirtieron en residentes permanentes del país.
Según señala el Informe Anual sobre Inmigración, el aumento en la tasa de migrantes “particularmente en la clase económica, nos ayudará a mantener nuestra fuerza laboral, a apoyar el crecimiento económico y estimular la innovación”. Canadá se ubica en el puesto 12° del Informe de Competitividad Global 2018 del Foro Económico Mundial, además de ostentar el primer lugar entre los países con las fuerzas laborales más diversas.
El Ministerio de Inmigración ha mostrado públicamente su compromiso con la migración, en un país en que una de cada cinco personas no nació en Canadá, a la vez que prometió la suma de 5,6 millones de euros para apoyar y reforzar iniciativas de reasentamientos a nivel global. Esta política migratoria se enmarca en un contexto mundial más restrictivo. Muchas naciones occidentales han endurecido las políticas hacia los inmigrantes, como Estados Unidos, inserto en el debate sobre la creación de un muro fronterizo para impedir la llegada de más refugiados.
Este objetivo a futuro fue ampliamente elogiado por Filippo Grandi, Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, quien puso énfasis en la buena labor de Canadá por la “extraordinaria generosidad, apertura y disposición” en esta materia.
La iniciativa canadiense, según los expertos, podría contribuir a bajar los altos niveles de refugiados que se producen cada año.b