Ezzati analiza la cumbre sobre abusos en el Vaticano
Tras la cumbre vaticana sobre protección de menores en la Iglesia, el cardenal dijo que se necesita avanzar en transparencia. El arzobispo de Santiago valoró las exposiciones hechas por mujeres y la necesidad de mayor colaboración entre obispos.
La semana pasada el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, aseguró que siguió “con particular interés y atención” el encuentro convocado por el Papa Francisco en Roma. La cita trató sobre los temas de abusos a menores dentro de la Iglesia. Según contó el prelado, estuvo atento al cronograma, las conferencias de prensa y las ponencias de los expositores, y en conversación con
La Tercera entregó sus primeras impresiones.
“Me han conmovido profundamente los testimonios de las víctimas presentes”, afirmó el cardenal. De manera especial, dijo, lo marcó el relato de un joven chileno residente en Alemania, “por la profundidad de sus palabras y por la genialidad de su interpretación musical” (una obra de J. S. Bach, en violín).
La figura de Ricardo Ezzati resulta controversial. El jefe de la Iglesia de Santiago actualmente es investigado por el fiscal de O’Higgins, Emiliano Arias, por el presunto delito de encubrimiento de abusos. Indagatoria en la cual se acogió a su derecho a guardar silencio. Su defensa asegura absoluta inocencia.
La cumbre, en tanto, se prolongó por cuatro días, de jueves a domingo, en el Vaticano. Los 190 asistentes, principalmente representantes de las conferencias episcopales del mundo, se reunieron en el Aula Nueva del Sínodo. Allí escucharon, por ejemplo, las ponencias del secretario adjunto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Charles Scicluna, del cardenal Reinhard Marx y de la periodista Valentina Alazraki, entre otros.
Ezzati, quien siguió la dinámica del encuentro a través de los medios de comunicación del Vaticano, señaló que “las intervenciones han sido significativas. Seguí de manera especial la presentación inicial del Papa Francisco, lo mismo que sus palabras pronunciadas el domingo, al término de la eucaristía”.
Respecto de las otras exposiciones, dijo que “me ha llamado particularmente la atención la presentación hecha por la profesora Linda Ghisoni, la intervención de la comunicadora social Valentina Alazraki y la del cardenal Marx, presidente de la Conferencia Episcopal de Alemania”. Agregó que “me parecieron particularmente lúcidas algunas intervenciones de los expertos, en especial de las mujeres, que han destacado la necesidad de relaciones más humanas y de mayor colaboración entre obispos, comunicadores sociales y responsables de la justicia civil”.
Varias presentaciones aludieron a la transparencia de la Iglesia. En este aspecto, el arzobispo de Santiago reconoció que “en el ámbito de la transparencia necesitamos seguir creciendo”.
Tras el encuentro vaticano, el Pontífice propuso ocho medidas para combatir el abuso a menores. Para Ezzati, “en el caso de Chile, puedo dar testimonio de que ellas han sido objeto de aná- lisis y de decisiones durante los últimos años, aunque, hay que reconocerlo, no siempre con los resultados deseados”.
El exportavoz de la Santa Sede, Federico Lombardi, anunció que se crearán tres documentos: un Motu propio del Papa sobre la protección de los menores y las personas vulnerables, una nueva ley de la ciudad del Vaticano y la publicación de unas líneas guías con énfasis en la prevención. También se entregará un vademécum preparado por la Congregación para la Doctrina de la Fe, para ayudar a los obispos a comprender sus tareas.
Ezzati planteó que “son temas que necesitan ser considerados y profundizados constantemente, a la luz de la experiencia adquirida, de los aportes de nuevos conocimientos y con la ayuda de todos los sectores de la sociedad”.b