Desahogo azul
A la U le bastan 33 minutos ante Huachipato y gana su primer partido del año con mucha autoridad. Rodríguez, Herrera y Guerra dibujan el marcador frente a un rival que nota el cambio de plantel.
A pesar de lo expresivo del marcador, no fue un gran partido el de la U, pero qué más da. El pésimo momento institucional y deportivo no daban para regodearse y si los chispazos frente a un inocente Huachipato alcanzan, bienvenidos sean para celebrar el primer triunfo del año, en el quinto intento.
Fue justo en el partido en que llegaban con seis bajas y en el que más lo necesitaban. En el duelo en que una derrota hubiese significado un escenario absolutamente desastroso para Frank Kudelka.
Los azules necesitaron apenas 33 minutos para edificar una victoria que se había tornado en imperiosa. Todos los goles que no le habían salido a lo largo de un tortuoso 2019, aparecieron en media hora de compromiso.
Dicho está, el de la U no fue un gran cotejo, pero aprovechó cada una de las opciones que se creó. Las pelotas detenidas y Pablo Parra fueron fundamentales para aquello. El ex Cobreloa habilitó, inquietó e incluso le fue arrebatado un gol legítimo que no fue cobrado como tal. Las hizo todas y se erigió como el mejor del desahogo azul.
Primero habilitó el cabezazo de Rodríguez para el 1-0. En medio de eso, Herrera volvió a apoderarse de los lanzamientos penales en el Romántico Viajero, tal como entre 2014 y 2016, y logró estirar las cifras. Parra, eso sí, volvió a ser preponderante
en el tercero de la U, tras provocar el rebote que permitió a Guerra, uno que volvía, establecer el 3-0.
La U se conformó con ese marcador. La tarea ya estaba hecha. Y aunque puede parecer conformista, en medio de un año difícil, es más que suficiente. Quizás por eso se olvidó de generar juego en el segundo lapso. Pero qué importaba eso, si volvió a saborear el triunfo y una sensación que hace rato había extraviado. ●