La épica tumba al líder
En cinco minutos, Iquique remonta un partido que perdía por 0-2 hasta los 90’, cortando así la racha de seis victorias que acumulaba Unión Española.
Iquique lo ganó apelando al amor propio y a la debilidad de Unión Española, que llegó hasta Cavancha con seis victorias al hilo y el liderato absoluto. Lo ganó con el orgullo herido, sintiéndose pasados a llevar por dos juga
das que el árbitro no cobró como debía cobrar. Tal sentimiento de injusticia hizo que el aplomo aflorara, así como también el buen juego. Cinco minutos, tres goles y una remontada épica.
Los hispanos ya lo habían sufrido con Curicó la fecha pasada. O casi. Los torteros, viéndose en desventaja, se adueñaron de la pelota y complicaron sobremanera al cuaizquierda
dro hispano, llegando incluso a anotar el empate parcial.
En el Santa Laura salvaron la victoria gracias al contragolpe, y en el Norte todo apuntaba a lo mismo. El gol de Sebastián Varas se estaba haciendo poco con la incesante presión de los Dragones Celestes, que con travesaño incluido de Matías Donoso, rozaban el empate. No obstante, una jugada por la de Misael Dávila, y un mal despeje iquiqueño, bastó para que los dirigidos por Fernando Díaz aseguraran el liderato por una fecha más. O al menos eso parecía.
Porque el partido estuvo marcado por la polémica y la compensación. José Cabero, árbitro del partido, cobró lo que era un penal claro como falta fuera del área. También, no se validó un cabezazo de Edwuin Pernía que ingresó completamente. Un rebote en la mano de Palomeque, a los 88’, sirvió como excusa para redimirse y darle vida a Iquique, que pese al 0-2 no bajó los brazos. Donoso, con un potente remate, dio inicio a lo que terminaría siendo increíble.
Nadie imaginó lo que ocurriría en los cinco minutos de descuento. Un zurdazo de Pernía salido de la nada puso el 2-2, y dos minutos después, cuando Barbieri ya había fallado una clara, Donoso se inscribió con un doblete para darle la épica victoria a los locales.b