Otra derrota arrincona a Mario Salas
Con un gol de Diego Vera, los torteros vencen 1-0 a un pobre Colo Colo en la impresentable cancha de La Granja.
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Con cuatro derrotas consecutivas, el proyecto del Comandante tambalea en un Cacique perdido en su escasez de juego.
Carlos Tapia
Con un plantel estelar, Colo Colo estaba llamado a lucharle la hegemonía a la Católica este año. Las expectativas eran altas. Pero pasaron cinco fechas y la situación cambió radicalmente. Un elenco sin una idea de juego establecida, con rendimientos individuales débiles y una banca de reacciones lentas. El Cacique se hunde en sus miserias luego de su cuarta derrota consecutiva, ahora con Curicó Unido. Y eso que estamos recién en febrero. Mario Salas queda en la cornisa.
Cualquier análisis del partido, sea cual sea, debe considerar un factor clave: el pésimo estado de la cancha de La Granja. Impresentable para la Primera División.
Planteado esto, Salas movió el tablero buscando mejores respuestas: Véjar, Carmona y Suazo; por Opazo, Fuentes y Provoste (sin Sub 21 en la titularidad). Esto no
fue suficiente para ver a un Colo Colo distinto, con mejor posesión, mejor salida o mejor control. Nada.
Más allá de la complejidad
del campo, los torteros se acomodaron mejor y fueron más que su rival. Tuvieron tres opciones de gol en la primera parte, pero el pecado fue la falta de finiquito, para plasmar en el marcador esa superioridad. De esas chances, la más clara fue de Cortés, en los 36’, quien se metió profundamente en el área pero definió mal.
En la vereda contraria, el tándem Bolados-BlandiMouche no tenía conexión. En ese sentido, el ex San Lorenzo, quien asomaba desde el arranque luego de resultar afectado por bombas de
estruendo en el Monumental, corría mucho en busca del balón pero era escasamente asistido. Un dato es decidor para ejemplificar el pobre primer tiempo de los albos: cero remates al arco. Ni siquiera tiros fuera del marco. Nada de nada.
El panorama se puso más oscuro en el complemento, profundizando todas las dudas y limitaciones. En el arranque, Diego Vera abrió la cuenta, mezclando las virtudes curicanas y la fragilidad defensiva colocolina. Federico Castro desborda a Campos, centra y arremete Viru
en ofensiva y espacios en la zaga, que Curicó no aprovechó. Bien pudieron aumentar la diferencia, pero quedaron cortos.
Gran victoria de los curicanos, que se encaraman en la tabla (a tres puntos de la UC). En las antípodas está el Cacique, en el fondo de la clasificación, sin identidad, sin juego. Nada de nada.b