“Maradona representa el patriarcado”
Habla Paula Dapena, la jugadora española que se rebeló contra los homenajes y la idolatría hacia el 10.
Paula Dapena (24), la jugadora española que el fin de semana dio la vuelta al mundo al negarse a guardar un minuto de silencio en honor a Maradona, se oye muy tranquila. No parecen afectarle los titulares que inmortalizaron su desaire ni las amenazas que ha sufrido desde entonces por fanáticos de Maradona. Todo lo hizo, asegura, guiada por sus ideales.
Son las 23.00 en Pontevedra, Galicia, pero la mediocampista del Viajes Interrías comenta con La Tercera estos convulsos días. “Recibí mensajes de ánimo y apoyo, pero de pronto llegaron hombres fanáticos de Maradona de todo el mundo a defenderlo… Me amenazaron de muerte. Es una barbaridad y ahí se ve cómo el patriarcado ejerce su opresión”, confiesa.
Paula se considera parte de la primera línea contra el abuso masculino. Dice que no buscaba fama, mucho menos el acoso de los fanáticos. Que actuó por convicción. “Me enteré el mismo día de que se iba a guardar este minuto de silencio y actué de acuerdo a mis ideales. Maradona, varón y enaltecido por las masas, es para ella un emblema más del paradigma que muchas quieren romper. “Maradona representa el patriarcado. Es un futbolista varón, al que se le permite hacer lo que quiera por haber sido muy bueno jugando al fútbol. Claramente representa la imagen del patriarcado”, argumenta.
Parecía impensado que algún futbolista negara a Maradona como uno de sus referentes, pero para Paula no está ni en su Top 100. “Ser futbolista va más allá de las habilidades que tengas en el deporte. Tiene que ver con quién eres como persona. Sus habilidades (de Maradona) eran espectaculares, nadie puede negar eso, pero no se puede separar lo que hizo dentro de la cancha con lo de afuera de ella, porque la persona es la misma”.
La ibérica apunta a la relación del Diego con las drogas y el alcohol, las denuncias de abuso y violencia contra mujeres y los hijos no reconocidos o con los que perdió contacto. “Espero que las nuevas generaciones puedan tener referentes masculinos y femeninos. Y buenos referentes, porque los niños y niñas ven como un ejemplo a muchos futbolistas”, cierra. ●