DERECHOS, RESPETO Y REPARACIÓN
SEÑOR DIRECTOR
Revertir la actual invisibilidad constitucional de los pueblos originarios que habitan nuestros territorios es un deber ineludible e impostergable, que hoy más que nunca, nos convoca como sociedad.
Sin duda la definición de 17 escaños reservados entre los 155 cupos para los convencionales constituyentes es un paso fundamental. Una medida necesaria que se traduce en una señal concreta de reparación histórica, de puesta en valor de su inmenso aporte cultural e identitario, y en definitiva, de respeto a sus derechos.
Como Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, este gesto se enmarca muy bien en el trabajo que hemos venido realizando, acorde a lo que la ley nos mandata en diversos principios y funciones, tendientes al reconocimiento cultural de estas comunidades.
Bajo este principio, en 2018 pusimos en marcha un proceso de restitución de bienes culturales de pueblos originarios, y en noviembre recién pasado, el Presidente Piñera anunció la presentación de un proyecto de Ley de Patrimonio Cultural Indígena, en el que se avanzará luego de un proceso de consulta previa, acorde a la legislación internacional y nacional.
Ante los inmensos desafíos sociales y políticos que enfrentamos como nación, hoy tenemos la oportunidad única de contribuir a transformar nuestra sociedad en una más respetuosa de sus más diversa y plural.
El acuerdo en torno a la participación de los pueblos originarios en el proceso que definirá la nueva Constitución es clave desde el punto de vista político, pero también crucial para todo el país. Esto porque implica sellar una nueva relación con estas comunidades, con su cosmovisión, territorios, lenguas y tradiciones.
Consuelo Valdés
Ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio