Refuerzan seguridad de Washington en medio de nuevas alertas por violencia
La capital de Estados Unidos, Washington, se encontraba ayer bajo un operativo de cierre de emergencia mientras las autoridades de seguridad se preparaban para una serie de marchas a favor del Presidente Donald Trump en todas las capitales de los 50 estados del país este fin de semana.
Las fuerzas de seguridad establecieron barreras y emplazaron miles de efectivos de la Guardia Nacional para tratar de evitar ataques violentos, como los que sacudieron a Estados Unidos el 6 de enero.
El FBI advirtió a las agencias de policía sobre posibles protestas por parte de grupos armados fuera de los edificios de gobierno de los 50 estados a partir de ayer y hasta la toma de posesión del presidente electo Joe Biden, el 20 de enero. Las marchas fueron convocadas por partidarios de Trump, quienes creen en sus falsas denuncias de fraude electoral.
Michigan, Virginia, Wisconsin, Pennsylvania y Washington se encontraban entre los estados que activaron a sus guardias nacionales para reforzar la seguridad. Texas cerró su edificio del Capitolio hasta el día de la toma de posesión de Biden. Steve McCraw, director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, dijo en un comunicado el viernes por la noche que la inteligencia indicaba que “extremistas violentos” podrían tratar de aprovechar protestas planeadas en Austin para “realizar actos criminales”.
En tanto, The New York Times señaló ayer que las aerolíneas comerciales han registrado un alza en las armas controladas, y las fuerzas del orden federales generaron nuevas alarmas sobre complots extremistas.
La Administración de Seguridad del Transporte está aumentando el número de alguaciles federales en los vuelos y de perros detectores de explosivos en los aeropuertos.
Sujeto armado ante Capitolio
CNN, por su parte, informó que un hombre fuertemente armado fue arrestado el viernes en Washington cuando intentaba pasar por uno de los numerosos puntos de control cerca del Capitolio. La policía encontró una pistola cargada y más de 500 cartuchos de municiones en poder de Wesley Allen Beeler, originario de Virginia. El sujeto, quien trató de emplear una credencial falsa, enfrenta los cargos de tenencia de arma de fuego no registrada y posesión ilegal de municiones.
Los líderes demócratas de cuatro comisiones del Congreso dijeron ayer que habían iniciado una indagación de los eventos del 6 de enero protagonizados por parte de una combinación de extremistas y partidarios de Trump, y habían escrito al FBI y otras agencias de inteligencia de seguridad.